“Trump se encuentra bien y está siendo examinado en un centro médico”: campaña del candidato republicano da parte de tranquilidad

Este sábado, 13 de abril, el candidato republicano y expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, fue evacuado, con su rostro bañado en sangre, de la tarima en la que se encontraba durante un mitin de su campaña, en el estado de Pensilvania, luego de que se escucharan disparos entre la multitud.

Trump, que hacía pocos minutos había dado inicio a su discurso preparado especialmente para el evento, se agachó al instante y fue escoltado de inmediato por su esquema de seguridad.

La campaña del candidato demócrata agradeció la pronta reacción frente al atentado y aseguró que “Trump se encuentra bien y está siendo examinado en un centro médico”.

“El presidente Trump agradece a las fuerzas del orden y a los socorristas por su rápida respuesta durante este acto atroz”, dijo el portavoz Steven Cheung a través de un comunicado, divulgado la tarde de este sábado.

Por su parte, el Servicio Secreto, que se encarga de la custodia de presidentes y exmandatarios de Estados Unidos, indicó en otro comunicado de prensa que “el expresidente está a salvo”.

Trump se encontraba enseñando a los asistentes al mitin una gráfica con cifras sobre los cruces fronterizos durante su acto de campaña público, el último antes del inicio de la Convención Nacional Republicana este lunes, 15 de julio, cuando comenzaron a sonar estallidos entre la multitud que se había concentrado en el lugar. Solo segundo después, se pudo observar a Trump colocándole la mano derecha en el cuello y se veía sangre en su rostro.

Rápidamente, el empresario de 78 años, se ocultó detrás del podio en donde se encontraba, al tiempo que los agentes de su equipo de seguridad subían al escenario y se escuchaban gritos entre la multitud. Los estallidos continuaron cuando los agentes lo custodiaban en el escenario.

La multitud aplaudió cuando Trump se levantó y alzó el puño en señal de que había salido ileso, gritando “Estados Unidos, Estados Unidos”.

“Vimos a mucha gente que se tiró al suelo, mirando con confusión. Escuché disparos, sonaron como petardos y una pistola de pequeño calibre”, dijo John Yeykal de Franklin, Pensilvania, que asistía por primera vez a un mitin de Trump.

El hijo mayor de Trump, Donald Trump Jr., publicó una foto en su cuenta de X en la que se observa a Trump, con el puño en alto y el rostro ensangrentado frente a una bandera estadounidense, con las palabras: “Nunca dejará de luchar para salvar a Estados Unidos”.

Por su parte, el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, publicó también en esa red social que estaba orando por la salud de Donald Trump.

El gobernador de Pensilvania (lugar de los hechos), Josh Shapiro, un demócrata, dijo en un comunicado en X que había sido informado sobre la situación y que la policía estatal de Pensilvania estaba presente en el lugar del evento. “La violencia dirigida contra cualquier partido político o líder político es absolutamente inaceptable. No tiene cabida en Pensilvania ni en Estados Unidos”, sostuvo.

Medios locales en Estados Unidos reportan que al menos una persona falleció producto de los disparos que se escucharon este sábado durante el mitin.