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Nicolás Maduro. | Foto: A.P.

VENEZUELA

Revocatorio con bozal contra Maduro

Es oficial: el gobierno ignora la voz del pueblo y se atornilla hasta 2019 al obligar a la oposición a aceptar un referendo ‘light’ que no sacará del poder a la cúpula del chavismo.

24 de septiembre de 2016

Tras mucho pedirlo, los opositores lograron que el Consejo Nacional Electoral anunciara las fechas del proceso revocatorio, pero fue la peor noticia que podrían recibir. A pesar de que más de un millón de personas marcharon en la Toma de Caracas para exigir la salida del presidente Nicolás Maduro, el revocatorio solo podrá tener lugar a más tardar en marzo, es decir, después de la mitad del periodo. Por eso, aun si ganara la revocatoria, subiría al poder el vicepresidente, Aristóbulo Istúriz, y el chavismo permanecería en el mando. Para ello, el CNE aplicó los plazos más largos que le permite la Carta. Y como si eso fuera poco, ordenó que la oposición debería presentar el 20 por ciento de las firmas por cada estado, una medida abiertamente inconstitucional pues la circunscripción electoral para la Presidencia es nacional.

Así las cosas, no se ve una salida clara a la situación político-social de Venezuela. Y lo más irónico es que la oposición está tratando de aplicar unas disposiciones constitucionales impuestas por el propio Hugo Chávez en 1999. Así funciona el populismo cuando no sopla el viento a su favor.