Marta Lucía Ramírez ( Excandidata Presidencial). | Foto: Guillermo Torres

ENTREVISTA

“Esas 297 páginas cambian la Constitución”: Martha Lucía Ramírez

Aunque aún no se define por el Sí o por el No, la líder conservadora hace duras críticas a lo acordado en La Habana.

27 de agosto de 2016

SEMANA: Usted dijo que se referiría a los acuerdos una vez publicados. ¿Qué opina de ellos?

MARTA LUCÍA RAMÍREZ: Esas 297 páginas que cambian la Constitución con la colaboración de las Farc merecen mucho análisis. Lo acordado es complejo para que la votación sea simplemente Sí o No. Hay muchos interrogantes. ¿De dónde saldrán 10 millones de hectáreas para el Fondo de Tierras? ¿Cuáles serán las tierras inexplotadas? ¿Aquellas donde no han podido ir sus propietarios por amenazas? De otra parte, se crea una Unidad Especial de Investigación para combatir a ‘los enemigos’ del acuerdo: eso implica modificaciones al sistema institucional y una transformación tan profunda no se debió hacer sin dialogar con el pueblo.

SEMANA: ¿Cuál debe ser la posición del Partido Conservador frente al plebiscito?

M.L.R.: El presidente del partido ha debido convocar la convención y auscultar las bases para promover una posición unificada, coherente con nuestra doctrina y en defensa de las instituciones, promoviendo la pedagogía de un voto responsable e informado. No en vano las Farc van a tener diez curules que no se van a ganar en las urnas durante ocho años, y el país necesita políticos que prioricen las convicciones sobre intereses burocráticos, para enfrentar la coalición de las Farc con el populismo. De una vez les digo a Timochenko e Iván Márquez que no triunfarán en las urnas, y que aquellos que creemos en un país mejor para los colombianos los derrotaremos. Por mi parte, seguiré insistiendo en la necesidad de leer, votar a conciencia y de manera informada. El plebiscito se vota en un día, pero sus consecuencias son para toda la vida.

SEMANA: ¿Pero votará Sí o No?

M.L.R.: No tengo una posición aún. La tendré cuando acabe de leer los acuerdos. 

SEMANA: Usted envió una carta a La Habana con sugerencias sobre la dejación de armas. ¿Cómo ve ese punto?

M.L.R.: Envié varias con preguntas y sugerencias para que hubiera justicia. Propuse colonias penales agrícolas y que la entrada de las Farc a la política se hiciera después de un periodo de prueba de cinco años para tener la certeza de que cumplieron el acuerdo. Me llama la atención que los países acompañantes no exigieran un inventario previo y confidencial de armas hace dos o tres años, sino que este se realice en la entrada a las zonas de concentración.

SEMANA: ¿Qué cree de la tesis uribista de que es posible renegociar los acuerdos?

M.L.R.: La Corte Constitucional fue clara en que el resultado solamente obliga al presidente en cuanto a este acuerdo y que debe mantener la defensa del orden público. El presidente actual o quien lo suceda continúa obligado a buscar la paz. El acuerdo tiene cosas rescatables, pero hay aspectos que, si gana el No, deberían renegociarse.

SEMANA: ¿Qué opina de la justicia transicional acordada?

M.L.R.: Primero, creo inaudito que Santos no haya hecho una reforma integral de la Justicia y que terminara reformando todo exclusivamente en alianza con las Farc. Frente a lo acordado, creo que las Farc no van a responder por el delito del narcotráfico, ni a reparar con los recursos provenientes de él y los de las extorsiones a las víctimas. Me preocupa que más de 3.000 soldados terminen aceptando delitos que no cometieron para obtener beneficios de esa jurisdicción, puesto que ya están detenidos hace más de tres años, mientras que los cabecillas de las Farc no han tenido un solo día de cárcel.

SEMANA: En el corto plazo, ¿cómo ve la transición de las Farc a movimiento político?

M.L.R.: Es mejor tenerlos haciendo política que poniendo bombas o reclutando niños. Espero enfrentar la coalición populista de la que ellos hagan parte, sin que por la puerta trasera se nos vuelva a meter la plata del narcotráfico, del secuestro, de la minería ilegal ni de la extorsión. En este país somos más los que creemos que el camino correcto es hacer las cosas dentro del Estado de derecho y las instituciones. Quiero enfrentarlos políticamente.