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| Foto: Daniel Reina

RESUMEN

Los duros golpes a los capos

La muerte de dos jefes de bandas criminales y la ofensiva contra los Urabeños fueron algunos de los golpes más contundentes de este año.

19 de diciembre de 2015

Con tan solo cinco días de diferencia, dos de los hombres más peligrosos de Colombia murieron en 2015. Ambos eran jefes de bandas criminales y por años fueron el terror de dos extensas zonas de país: los Llanos Orientales y el Catatumbo. Se trata de Martín Farfán, alias Pijarvey, y Víctor Navarro, alias Megateo, respectivamente.

Aunque operaban a cientos de kilómetros de distancia eran siniestramente parecidos. Los dos estaban dedicados de lleno al negocio del narcotráfico desde hace años. Tenían ejércitos de sicarios conformados por más de 100 hombres a su servicio, dedicados, fuera de traficar, a secuestrar y extorsionar. Pijarvey era el jefe de la banda criminal autodenominada Libertadores de Vichada. Megateo de una disidencia del EPL. Los dos murieron en operaciones realizadas por la Dirección de Inteligencia de la Policía -Dipol- y la Dijín.

Estos no fueron los únicos grandes golpes contra las bacrim durante este año. Desde febrero, la Dirección de Carabineros, la Dipol y Antinarcóticos emprendieron una ambiciosa operación bautizada Agamenón con el fin de atrapar y desarticular a los Urabeños, la banda criminal de Darío Úsuga, alias Otoniel. Hasta el 15 de diciembre han arrestado 596 integrantes de ese grupo, incluidos algunos de los más cercanos al capo. Incautaron más de 30 toneladas de cocaína y decomisaron 154 bienes avaluados en más de 187.000 millones de pesos.

Si bien aún falta mucho camino por recorrer en la lucha contra las bacrim, lo cierto es que, con los Urabeños seriamente golpeados y dos de los grandes capos fuera de acción, 2015 termina con un balance positivo en ese frente.