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Para los miembros del partido de las Farc las condenas que actualmente sancionan el abuso a menores son suficientes. | Foto: Pixabay

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Cadena perpetua para violadores de niños: ¿Por qué las Farc se oponen?

La ponencia que busca hundir este proyecto de ley está firmada por los representantes Marcos Calarcá del partido de las Farc y Germán Navas Talero del Polo Democrático. Conozca las razones que hay en contra de esta iniciativa.

17 de agosto de 2019

Desde que el presidente de la república, Iván Duque, sugirió la conveniencia de evaluar la cadena perpetua para violadores y asesinos de niños, en el país se desató una controversia sobre la utilidad de esta iniciativa. El último movimiento en ese debate lo hicieron el partido de las Farc y el Polo. Ambas colectividades radicaron en la Comisión Primera de la Cámara una ponencia que busca hundir este proyecto. Consideran que las penas actuales son suficientes y que si se aplican en su totalidad son equivalentes a una cadena perpetua, por lo cual su aprobación no tendría fines prácticos. 

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En las últimas semanas, juristas y defensores de los derechos de los niños también han puesto en duda la efectividad de esta medida. De acuerdo a cifras de la rama judicial, el promedio de edad de los agresores de menores en Colombia es de 39 años y la condena para alguien que viole a un menor de edad, actualmente, es cercana a los 60 años, según el ordenamiento jurídico. Para muchos, esta sentencia es suficiente para asegurar que la persona pasará su vida privado de la libertad.

La apuesta del gobierno

En una prioridad de la agenda legislativa del presidente Iván Duque, se convirtió la propuesta de cadena perpetua para violadores y asesinos de niños. De hecho, el mandatario aseguró que: “Se necesita que el abuso o la violación de menores sea un delito imprescriptible, para que pueda abrir esa causa contra los criminales, contra esas mentes perversas, dañinas, miserables que se atreven a abusar de un menor en nuestro país”. 

El primer anuncio lo realizó en la instalación del Congreso el pasado 20 de Julio y después en la conmemoración de los 27 años de la Fiscalía General de la Nación, el jefe de Estado agregó que “no puede ser que en nuestro país, según los reportes que muestran distintas instituciones, incluida Medicina Legal, aparezca que los niños están cada vez más expuestos a violaciones o abusos en sus propios entornos familiares”. Afirmó además que no puede ser que haya procesos que se demoren tanto para sancionar ejemplarmente a quienes han cometido estos delitos.

Más de 30 congresistas firmaron esta iniciativa que señala que se puede imponer cadena perpetua a las personas que  “cometan delitos de homicidio doloso, secuestro, tortura, acceso carnal o actos sexuales abusivos contra menores de 14 años”.

El respaldo a la medida es tal que la representante del Partido de la U Marta Villalba pidió celeridad en el acto legislativo y aseguró que “queremos decirle a los niños y niñas que habrá cadena perpetua para los abusadores de niños en Colombia y esta es una obligación que tenemos los legisladores. Tenemos que garantizar el futuro de los niños”.

Las voces en contra

Pese al apoyo que ha tenido en la mayoría de las bancadas la propuesta, algunos juristas se han manifestado en contra de esta iniciativa ya que la consideran innecesaria.

El abogado Ramiro Bejarano consideró queesta es una propuesta irresponsable. Se conoce como populismo punitivo y no disminuiría en realidad los delitos. Haría de Colombia un Estado vengativo en contra de la Declaración Universal de Derechos Humanos y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos”.

Por otra parte, la jurista Mónica Roa asegura que aunque está de acuerdo con la preocupación que hay alrededor de la violación sexual contra menores de edad, no lo está con la cadena perpetua porque “es una medida que no va resolver absolutamente nada y no cambia ninguna de las condiciones que dan lugar al problema”.

Además la abogada agregó que “la violación contra menores ya está castigada con una pena de 60 años. El problema que tenemos no es que las penas sean suaves porque ya son duras. El problema es que son ínfimos los casos que logran denunciarse, que logran investigarse y que efectivamente se condenan. Precisamente para mí el enfoque tendría que estar en remover los obstáculos para denunciar, en mejorar las investigaciones y, por lo tanto, que se den más condenas”

En redes sociales el debate también está encendido y se aguarda por las discusiones de esta iniciativa que arrancarán el próximo martes.