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| Foto: Archivo Particular

ORDEN PÚBLICO

Por distraerse, unos ladrones descuidados murieron en un atraco fallido

Dos ladrones que trataron de asaltar un supermercado fallecieron a causa de los disparos que les propinó el dueño del lugar. El hecho causó controversia entre los que consideran que se trata de un hecho de intolerancia y los que estiman que actuó en legítima defensa.

1 de septiembre de 2017

A las 2:15 de la tarde, Mikael e Igor se acercaron descuidadamente al supermercado de la esquina, como cualquier cliente. Cuando entraron a la tienda, el más chico de ellos todavía traía puesto su casco de moto y el pantalón suelto a media nalga, como la mayoría de los jóvenes del barrio.  

Igor, el más grande, se acercó a la nevera para extraer dos botellas que presentó en el mostrador, mientras que Mikael sacó unos billetes de su bolsillo para pagar las compras, frente a la mirada vigilante del dueño del supermercado.

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Por eso, en cuanto Igor se asomó a la calle para verificar que no hubiera nadie cerca y sacó un arma de su bolsillo, con la que amenazó al cliente que esperaba su turno cerca del congelador de helados, el dueño del local reaccionó en cuestión de segundos y les disparó a corta distancia. 

Desenfundó una pistola de barrilete y le pegó al menos dos tiros a Igor y otro más a Mikael. Extrañamente, en ningún momento apuntaron directamente al tendero sino que se distrajeron con el otro sujeto presente. Bajo el fuego, ambos salieron eyectados de la tienda. El mayor aterrizó en las carriles del supermercado desde donde respondió a los disparos en tanto que el más joven se desparramó en la entrada del lugar.

Mientras trataban de emprender la huida, el tendero continuó su embestida. Igor alcanzó a correr hasta la esquina, pero Mikael gateó, se resbaló en tres ocasiones, herido de muerte y preso de los pliegues de su pantalón, hasta que se quedó quieto, boca abajo, a unos metros del lugar.

Según las fotos que se dieron a conocer después del incidente, los dos ladrones fallecieron a causa de las heridas de bala que les propinó el mercader.

En Caldas Novas, Brasil, donde sucedió el hecho, la publicación del video ha suscitado una fuerte controversia. Mientras que algunos calificaron al hecho de intolerancia, otros consideraron que se trató de un acto de legítima defensa frente a la violencia cotidiana que vive el país.

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Según el mapa de la violencia publicado por la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) en 2016, Brasil fue el país más violento del mundo en 2014, con cerca de 58.000 asesinatos registrados, 6.5 muertes por hora en promedio.

De acuerdo con lo que explicó el delegado de policía Wllisses Valentim Menezes, responsable del caso, en el asalto, los agresores de 18 y 19 años de edad lesionaron al cliente que se encontraba presente en el brazo, pero este se encuentra fuera de peligro.

Para el abogado del dueño de la tienda, está claro que se trató de un acto de legítima defensa, por lo cual espera que su cliente no salga multado con una fuerte pena de prisión, sino únicamente por el porte de arma para el que no tenía permiso.

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Aunque igualmente justificó el hecho debido a los múltiples asaltos que vivió recientemente el dueño del supermercado ante la ola de inseguridad que invade la región de sul de Goiás desde hace algunos años.