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Gilles de Robien, aspirante francés a la dirección general de la Organización Internacional del Trabajo, OIT. | Foto: Guillermo Torres

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"En la elección a director de la OIT podemos esperar sorpresas": Robien

El candidato francés a la presidencia de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Gilles de Robien, se encuentra de visita en Colombia para presentar su aspiración. Durante su estancia en el país, el rival de Angelino Garzón, se reunirá también con organizaciones sindicales.

27 de abril de 2012

Este viernes el aspirante francés al cargo de Director General de la Oficina Internacional de Trabajo (OIT), empezó una visita relámpago de 24 horas por Colombia, para presentar su candidatura. Gilles de Robien, quién ha ocupado varias carteras ministeriales en Francia, mantendrá reuniones con el ministro de Trabajo, Rafael Pardo, con la Canciller María Ángela Holguín, y también con las organizaciones obreras y patronales de Colombia.

Robien tiene claro que a un mes de la elección, que empezará el próximo 25 de mayo, se está desarrollando un trabajo importante por parte de los candidatos y de la diplomacia de los países lo que anticipa una pugna abierta y difícil para todos los aspirantes. "La manera en la que funciona el escrutinio es importante para la elección porque habrá tantas votaciones como sea necesario para llegar a la mayoría, es un escrutinio donde podemos esperar sorpresas", le dijo Robien a Semana.com

El exministro francés, quien tiene una amplia trayectoria política, considera que el futuro inmediato será de muchos desafíos para la OIT porque es necesario darle "un nuevo impulso para responder mejor a las condiciones de los trabajadores, la relación entre la economía y la parte social, para que el día de mañana el mundo del trabajo pueda beneficiarse de los conocimientos que tiene la OIT".

El candidato francés recordó que no está en Colombia para subrayar una competitividad con ningún candidato, y recordó que quiere presentar su proyecto como lo ha hecho en los países que ha visitado. Sobre su candidatura destacó que tuvo "un consenso favorable de la gran mayoría, por no decir de la totalidad de los países, en torno a mi proyecto y ya le corresponde a cada uno de ellos hacer esa elección y apoyar a quien corresponda", expresó.

Sobre las críticas que ha recibido la aspiración de Colombia a la OIT, muchas de ellas provenientes de los sindicalistas colombianos, Robien reconoció que no encuentra obstáculos especiales a la aspiración del vicepresidente Angelino Garzón y destacó que esta es una competencia en la que juegan varios elementos. "Aquí se tiene en cuenta la calidad del proyecto, la calidad del candidato, las lógicas regionales y los acuerdos diplomáticos".

Gilles de Robien ha trabajado desde el 2007 como delegado del Gobierno francés ante el Consejo de Administración de la Oficina Internacional de Trabajo. Sin embargo, su vida pública ha estado marcada más por la política que por su cercanía a los sindicatos.
 
Durante casi veinte años estuvo en la palestra pública, con mandatos de alcalde y diputado de la Asamblea Nacional. Formó parte del Gobierno entre el 2002 y el 2007 como Ministro de Infraestructura, Transporte, Vivienda, Turismo y Medio Marino, y después como Ministro de Educación Nacional, Enseñanza Superior e Investigación.

El político francés le dijo a Semana.com que el compromiso de la OIT con países como Colombia en el que se siguen registrando violaciones a los derechos humanos, es prioritario. "Hay 1.700 personas que trabajan en la OIT, que aportan estudios de terreno que le permiten a la organización entender los problemas y analizar a través de los medios jurídicos la importancia y conveniencia de las iniciativas jurídicas", explicó Robien.

En la recta final de la campaña para aspirar al cargo de director de la OIT, considerado como el segundo cargo más importante a nivel mundial, por detrás de la Secretaría General de la ONU, Robien, dijo que "tengo gran confianza en mis colegas, con quienes trabajo desde hace cinco años. Tengo muestras de confianza de ellos como cuando me eligieron para la Presidencia de la Conferencia Internacional del Trabajo, y por el trabajo que allí desarrollé", concluyó.