Home

Nación

Artículo

El gerente de la Rama Judicial será un superfuncionario con gran peso en las decisiones más importantes de ese poder. | Foto: Javier de la Torre

ESTADO

Los superpoderes del nuevo gerente de la Rama Judicial

La semana entrante, de afán y casi en secreto, será elegido el primer funcionario con este cargo. Manejará un presupuesto de 2,5 billones de pesos anuales.

12 de diciembre de 2015

Uno de los cargos más poderosos del país es paradójicamente el más desconocido. Su primer titular será escogido en los próximos días con mucha prisa y sin publicidad. Sin embargo, quien llegue a ocuparlo tendrá en sus manos un desafío tan complejo como titánico: gerenciar la justicia.

El puesto es nuevo y detrás de él hay una difícil partida de ajedrez. Muchos dicen que podrá tener más peso que los propios magistrados y que cualquier ministro. El ‘gerente de la Rama Judicial’ será el gran jefe de este poder y administrará uno de los presupuestos más altos de todo el Estado: 2,5 billones de pesos anuales.

Su labor principal es diseñar y ejecutar ese presupuesto, pero tendrá decenas de tentáculos. Podrá presentar proyectos de ley, administrar la carrera judicial, proponer nombres para magistrados de altas cortes, dirigir los concursos para nuevos cargos, liderar la escuela judicial, construir la infraestructura física y contratar las reformas tecnológicas, entre muchas otras tareas.

Por eso, hace unos meses el entonces ministro de la Presidencia, Néstor Humberto Martínez, lo calificó como “uno de los funcionarios más importantes de todo el Estado”. Esa persona llegará a liderar una rama que atraviesa la peor crisis de su historia, con álgidos conflictos internos, una imagen desfavorable superior al 80 por ciento, índices de congestión históricos y enormes retos de cara al posconflicto.

El origen del puesto no está exento de controversias. Fue creado este año por la reforma de equilibrio de poderes, un acto legislativo que generó una ruptura entre la cúpula judicial y el Ejecutivo pues les quitó muchos privilegios a los magistrados y al fiscal y estableció un tribunal de aforados para juzgarlos.

Uno de los puntos centrales de esa reforma fue la eliminación del Consejo Superior de la Judicatura. Por cuenta de escándalos de algunos de sus miembros existía la percepción de que los abogados no podían gerenciar la rama. Como tampoco puede volver a estar en manos del Ejecutivo, pues la independencia de la justicia depende en gran parte de su autonomía presupuestal, se resolvió construir un nuevo modelo.
 
Se trata del Consejo de Gobierno Judicial. Maneja una fórmula parecida a la junta del Banco de la República, conformado por nueve miembros: los tres presidentes de las cortes, un representante de los jueces, otro de los empleados, tres expertos y el gerente. Para elegir a este último los ocho anteriores debían estar posesionados y, por eso, en medio del agite decembrino, ese trámite se surtió el pasado viernes 11 de diciembre.

Así, menos de cinco días después, siete personas elegirán al funcionario más poderoso de la justicia. El Consejo de Estado retiró al octavo miembro, el representante de los jueces y magistrados Vicente Calixto de Santis, porque consideró nula su elección. Pero hace unos días los demás definieron no esperar a elegir su reemplazo para continuar con el proceso.

Por eso, convocaron la votación para nombrar al supergerente el 18 de diciembre, la víspera del comienzo de la vacancia judicial. En las altas cortes se dice que el afán se debe a que el año entrante cambian los presidentes de las cortes. Si no se vota esta semana, la presidenta de la Corte Constitucional, María Victoria Calle, el de la Corte Suprema, Leonidas Bustos, y el del Consejo de Estado, Rafael Vergara, no podrían participar.

En este momento hay dos nombres en la baraja de favoritos. El primero es Hernando Sierra Porto, actualmente director ejecutivo de administración judicial. Es un funcionario reconocido, hermano del expresidente de la Corte Constitucional Humberto Sierra, y cae muy bien en el Palacio de Justicia pues es considerado de la casa. Podría tener el apoyo del bloque costeño, lo cual le ha generado críticas. La segunda opcionada es Constanza Rivera, quien ya gerenció la rama y actualmente trabaja en la Procuraduría. Se dice que la apoyaría el presidente del Consejo de Estado. Vergara le dijo a SEMANA que falta evaluar las hojas de vida y por el momento no es cierto que tenga una candidata para esa elección.
 
Sin embargo, no sería raro que el proceso se suspenda pues actualmente cursan demandas contra los miembros del Consejo de gobierno y contra el mecanismo de elección del gerente. Así, la semana en que comienza la Navidad también podrá ser una de las más claves de la justicia este año.