Home

Nación

Artículo

REJAS OTRA VEZ

Nuevo auto de detención contra sindicados en el caso de Gloria Lara

16 de enero de 1984

Cuando prácticamente la opinión daba por sentado que el caso de Gloria Lara había quedado cerrado el 4 de octubre de este año, el Tribunal Superior de Bogotá, a finales de la semana pasada, revocó el auto del juez 16 Superior que decretaba la libertad incondicional de los sindicados, y ordenó nuevamente su captura, por considerar que sí existen indicios suficientes para sustentar el auto de detención contra los sospechosos.
¿Qué significa, exactamente, la revocatoria de la libertad decretada por el Tribunal Superior-de Bogota?
En todo proceso penal existen tres etapas, en las que es necesario aportar pruebas de diverso "calibre". Para dictar auto de detención se requiere que existan indicios graves; para llamar a juicio se requiere además la prueba del cuerpo de delito, y para condenar, la plena prueba del delito y de la autoría.
Los sindicados por el asesinato de doña Gloria Lara se encuentran en la primera etapa, debido a que el Tribunal Superior de Bogotá consideró, de conformidad con el artículo 439 del código de procedimiento penal, que sí existían indicios graves para mantenerlos privados de la libertad. Pero la decisión del Tribunal no implica necesariamente la culpabilidad de los sindicados, que sólo podrá dictaminarse una vez culminado el proceso, si el juez de conocimiento encuentra mérito para llamarlos a juicio y posteriormente para condenarlos.
Extraño como parece, lo que podría definirse como una "revocatoria de una revocatoria" de un auto de detención es apenas un procedimiento normal en el derecho penal colombiano, estatuído como una garantía de imparcialidad. En este caso se produjo una apreciación de los elementos probatorios por parte del Tribunal Superior, distinta de la que tuvo el juez 16 Superior, para quien habían desaparecido los motivos que inicialmente generaron la detención de los implicados. Pero así como la providencia que decretó su libertad no los exhoneró de toda responsabilidad, la dictada por el Tribunal, ordenando de nuevo su captura, tampoco les atribuye la culpabilidad total. Quedaría aguardar a que se agote el curso normal de este proceso, y sólo entonces podrá dictaminarse si los inicialmente sindicados por el crimen atroz de Gloria Lara son, ciertamente, sus asesinos. De ser así, sin embargo, es poco probable que el delito llegue finalmente a castigarse. Según informaciones aún no confirmadas oficialmente, los sindicados viajaron a París, donde permanecerán radicados en calidad de "refugiados políticos"...