Home

Noticias

Artículo

Orden público

"La Fuerza Pública procedió con total profesionalismo": Gobierno

Martes 6, 8:00 horas. Rechazo e indignación provocó el asesinato del Gobernador de Antioquia, Guillermo Gaviria, el ex ministro de justicia, Gilberto Echeverry y siete militares, secuestrados por las Farc. El Gobierno culpa al grupo guerrillero.

5 de mayo de 2003

Según un comunicado oficial, al llegar a la zona donde ocurrieron los hecho, el Ejército encontró en el suelo nueve cuerpos sin vida, con tiros de fusil algunos de gracia en la oreja y otros en la nuca. El Gobierno aceptó que las operaciones de rescate se estaban llevando a cabo desde la semana pasada, cuando habían localizado el posible paradero de nueve secuestrados cerca al municipio de Urrao (Antioquia). "La Fuerza Pública procedió con total profesionalismo, con tropas altamente especializadas con una planeación operativa que garantizaba el menor riesgo para las víctimas y en cumplimiento de su deber de proteger la vida y devolver la libertad a los ciudadanos", indica el comunicado. Allí también se dice que 75 hombres llegaron al campamento, luego de descender de helicópteros a media hora de camino del lugar hasta llegar al sitio donde se encontraban las víctimas. "Ni durante el desembarco, ni durante el desplazamiento, las tropas hicieron disparo alguno. Tampoco los helicópteros. No hubo combates", agrega. Sin embargo, otra versión de un frente regional de las Farc sostuvo que las muertes fueron debido a la presencia de una operación aerotransportada compuesta por aproximadamente 600 hombres. Según el Gobierno, la operación comenzó hacia las diez de la mañana de ayer cuando hombres de la fuerza de despliegue rápido, Fudra, salieron del aeropuerto de Ríonegro (Antioquia). Dos horas después llegaron al campamento, luego de hacer un seguimiento durante seis días. El campamento se encontraba ubicado en la vereda La Encarnación, zona rural de Urrao, donde fueron hallados los cadáveres. Allí estaban montados los cambuches donde permanecían los secuestrados, que según relató un sobreviviente se encontraban en precarias condiciones de salud. La esposa del gobernador Yolanda Pinto de Gaviria, quien luchó constantemente durante la retención de su esposo, sostuvo que nunca estuvo de acuerdo con las operaciones de rescate que realizaba el Ejército y que así se lo manifestó al Gobierno.