
Opinión
Unidos venceremos, divididos caeremos
Hago un llamado a los principales líderes y partidos de la derecha a unirse, dejando de lado las rivalidades y los egos, teniendo como objetivo primordial salvar a Colombia.
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Nos encontramos en una etapa crucial para la democracia colombiana, como si se tratase del preludio a la encrucijada del destino que viviremos en 2026. En primer lugar, el Gobierno Petro se encuentra en crisis teniendo en cuenta las negociaciones del general Huertas con miembros de las disidencias y su traición a la patria, al igual que las excentricidades de Verónica Alcocer y los esfuerzos clientelistas de Benedetti para tratar de aprobar los proyectos del Gobierno nacional. A su vez, los diferentes partidos políticos comienzan a encender motores y prepararse para la batalla definitiva por el futuro de Colombia, desde el uso de las redes sociales a la maquinaria tradicional. No obstante, al igual que ocurrió en las fatídicas elecciones de 2022, se puede evidenciar un sentimiento de división en la derecha política, por lo cual, si no nos unimos, perderemos ante la izquierda radical que, a pesar del desgobierno de Gustavo Petro, aún se mantiene igual de poderosa.
Esta última afirmación la podemos confirmar con la votación obtenida por el Pacto Histórico en su consulta interna el pasado mes de octubre, eligiendo a Iván Cepeda con alrededor de 1,5 millones de votos, siendo este el 65 % de los votos totales obtenidos por la coalición (2,7 millones). Por otra parte, la derecha se encuentra fragmentada, dividida como si se tratase de líderes feudales en guerra, en que sus seguidores actúan como vasallos fanáticos, sin el ánimo de conciliar o buscar unidad.
No obstante, figuras como Álvaro Uribe Vélez vieron esta problemática con meses de anterioridad y han estado desarrollando conversatorios interpartidistas con candidatos de diferentes partidos y movimientos, para así fomentar la unidad. Por otra parte, el candidato Abelardo de la Espriella propuso realizar una encuesta extensa a nivel nacional para elegir al candidato de la derecha este 10 de diciembre; sin embargo, si bien su propuesta busca resolver esta problemática, puede llegar a perjudicar al candidato escogido debido a la cantidad de tiempo entre el 10 de diciembre y la primera vuelta presidencial, se encuentran en un margen temporal muy amplio, lo que generará desgaste de imagen al hacer una campaña tan extensa.
Ahora bien, la decisión de escoger al nuevo presidente no debe ser tomada a la ligera ni debe ser influida exclusivamente por medio de un examen de popularidad. El nuevo presidente debe ser un líder que cuente con la dignidad de ser un estadista, un hombre o mujer con las preparaciones académicas y la experiencia que pueda guiar a Colombia terminada la horrible noche, y tenga la diligencia y la sabiduría para conducir al país desde la política programática.
Por último, debo reiterar la urgencia con la que el Partido Centro Democrático debe elegir a su candidato interno antes de que comiencen las fiestas de diciembre. Esto se debe a que este vehículo electoral será el principal actor político en las elecciones legislativas de 2026 debido a la popularidad que ha ganado como partido de oposición, al realizar un control político intachable a un gobierno cuya aprobación está alrededor del 30 %, según indican encuestas de Invamer. Sumado a todo a lo anterior, la estructura política y la cantidad de líderes y credenciales a nivel nacional con que cuenta el partido, al igual que el amor que sentimos por su líder natural, Álvaro Uribe Vélez, son factores decisivos en el protagonismo que jugará este vehículo electoral en las próximas elecciones. Por lo cual, debemos recordar que las disputas internas solo alimentan las páginas de los periódicos y divierten a la izquierda radical, de modo que deben dejarse de lado, para que así, unidos, podamos volverle a dar tranquilidad a Colombia.
Por tal motivo, hago un llamado a los principales líderes y partidos de la derecha a unirse, dejando de lado las rivalidades y los egos, teniendo como objetivo primordial salvar a Colombia. Hace unos meses, todos los líderes políticos dejaron sus planes de lado para unirse en oración por la vida de Miguel Uribe Turbay y para despedirlo cuando falleció ese trágico 11 de agosto; en esta ocasión, Colombia pide a gritos esa misma unidad en las elecciones. También esta reflexión incluye a la juventud, la cual cada día se vuelve más antipetrista, pero también más radical y sectaria, lo cual resulta ser nocivo para la democracia. Jóvenes de Colombia, los invito a defender la democracia usando argumentos, dejando de lado el fanatismo y enfocando sus esfuerzos en lograr una cooperación nacional que busque la unidad de nuestra patria.
