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¿Se convertirá el trámite de la tributaria en una carta al Niño Dios?

Aunque el gobierno ha expresado su interés y confianza en que el Legislativo mantendrá el articulado que ya fue aprobado en la Ley de Financiamiento, algunos partidos han hecho saber que tienen sus propias propuestas. Y pelearán por incorporarlas.

11 de noviembre de 2019

Un nuevo pulso de poder podría marcar la discusión del proyecto de ley de reforma tributaria que arranca esta semana en el Congreso de la República y que busca revivir la Ley de Financiamiento que hundió la Corte Constitucional el 16 de octubre pasado.

Aunque el gobierno ha expresado a través del ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, su anhelo de lograr que la iniciativa sea aprobada tal como fue radicada el pasado 22 de octubre, pocos creen que esto sea realista. Ni siquiera los mismos partidos que apoyaron al presidente Iván Duque han avalado esta propuesta pues en público y en privado han dicho que esperan incluir algunos artículos o revisar otros que habían sido aprobados en la hundida Ley de Financiamiento.

Para algunos expertos en temas legislativos, en vísperas de la época navideña muchos congresistas y diferentes partidos están trabajando en hacer propuestas como si se tratara de la redacción de una ‘Carta al Niño Dios’ por la cantidad de cambios que aspiran hacerle al proyecto de ley radicado por el ministro Carrasquilla el 22 de octubre pasado. Sin embargo, algunas bancadas ya han dado a conocer sus propuestas y muchas de ellas están enfocadas en mejorar el texto que presentó el Gobierno.

Por eso las reuniones de esta semana definirán el rumbo de varias de las iniciativas que ya han anunciado tanto los partidos independientes, como los de oposición y los leales al gobierno. Este martes 12 de noviembre debería conocerse la ponencia definitiva para primer debate pues las comisiones terceras de Senado y Cámara están citadas el miércoles para comenzar el análisis.

Esto pondrá al rojo vivo la discusión de esta reforma tributaria, que ha defendido a capa y espada el gobierno, con el ministro Carrasquilla a la cabeza y con escuderos como los integrantes del Consejo Gremial Nacional, pero que también tiene muchos contradictores en varias bancadas.

En la antesala de la discusión, se sabe que varios partidos han hecho reuniones para definir cuáles serán los puntos de honor que defenderán en las cinco semanas que le restan para su aprobación a esta iniciativa.

Hasta el momento se cuentan por decenas las proposiciones que llevarán desde esta misma semana los partidos políticos para incorporar en el texto de la reforma tributaria que tendrá que estar aprobada antes del 16 de diciembre próximo. Esto podría poner en aprietos la estrategia del ministro Carrasquilla, que tendrá que sacar toda su artillería para tapar más de un gol que podría tratar de colarse, evitar un excesivo desgaste en la negociación de concesiones y defender el texto que presentó

Sin embargo, algunas de las propuestas que se conocen de congresistas y bancadas independientes están enfocadas en mejorar el articulado que se aprobó el año pasado y defender algunos principios. En su columna del domingo en el diario El Tiempo, y a través de Twitter, el ex vicepresidente Germán Vargas Lleras dio a conocer los temas que impulsará su bancada durante la discusión que apenas comienza.

Vargas habló de que propondrán la eliminación del impuesto al patrimonio a personas naturales, que no produjo los resultados esperados; reducir progresivamente la tasa de tributación de los negocios hasta llegar al 33,5% (en la ley de financiamiento se buscaba reducirla hasta 30%); unificar el impuesto a dividendos en un 5%, eliminar el impuesto al consumo para inmuebles de más de $918 millones, acelerar la eliminación de la renta presuntiva, revisar la tasa de tributación para profesionales y asalariados, desgravar el componente inflacionario de los rendimientos financieros percibidos por las personas naturales, hacer que el gravamen a los movimientos financieros sea una retención en la fuente que puedan recuperar los contribuyentes y revisar cuidadosamente los resultados de las exenciones que se establecieron en la anterior ley de financiamiento.

También plantea eliminar las asimetrías del sistema impositivo que afecta a los productores nacionales y aumentar el recaudo con un plan de lucha contra la evasión y el contrabando. “Yo creo que en el Congreso hay voluntad política para expedir una ley que verdaderamente persiga los objetivos anunciados”, dijo en un tuit el líder del partido Cambio Radical, al tiempo que advirtió que, como otras colectividades, no están dispuestos “a servir de meros notarios del proyecto presentado”.

No es el único que ha expresado interés por mejorar lo que ya se aprobó el año pasado. Hace unas semanas el representante Óscar Darío Pérez dijo que la presentación de una nueva reforma debe servir para ajustar algunos de los temas que quedaron en la ley de financiamiento que se hundió. Entre ellos ha mencionado que se debe revisar el impuesto al consumo para las viviendas, que además de recaudar menos de lo esperado ha frenado la construcción y revisar temas como la renta presuntiva e incluso el tamaño de la rebaja en el impuesto de renta para las empresas.

Desde el Partido Verde también se vienen estudiando varias de las proposiciones que presentarán esta semana. Una de ellas fue planteada hace unos días por el senador Juan Luis Castro, quien advirtió la necesidad de hacer varios ajustes a la reforma, entre ellos revivir la comisión para analizar el impacto de las exenciones en el recaudo tributario.

El gobierno, por su parte, insistirá en que la iniciativa debe tener el menor número de cambios en el articulado para garantizar su aprobación en el corto tiempo disponible, las bancadas del Congreso no dejarán pasar la oportunidad para hacer los cambios que el año pasado propusieron y que no quedaron incorporados en la ley de financiamiento. La discusión está para alquilar balcón.