Política
José Félix Lafaurie responde a críticas por frentes de seguridad ganaderos: “No tenemos por qué cederle territorio a criminales”
El presidente de Fedegán respondió a todos los que critican su propuesta y cuenta el desespero que tienen los ganaderos del país.
SEMANA: ¿En qué consiste la propuesta de crear unos frentes de seguridad en el país?
JOSÉ FÉLIX LAFAURIE: El territorio está asediado y asolado por todos los actores criminales. Uno no tiene por qué cederle el territorio a los criminales porque el territorio, para quienes cumplimos la ley, lo usamos es para generar riqueza, bienestar y progreso. Además, para tener una visión de país que realmente tenga posibilidades en el futuro y lo que está pasando es todo lo contrario. Lo que yo siento es que, por lo menos el sector ganadero, ya se siente muy amenazado y ha empezado a dejar de ir con la frecuencia debida a estar atento a sus explotaciones y desarrollo. Por ello, la única respuesta que le podemos dar como ciudadanos respetuosos de la ley es tener una mayor capacidad de articularnos con aquellas autoridades que tienen obligaciones en el territorio para confrontar a los bandidos. Y eso no es solamente con la fuerza pública, también hay otras autoridades del poder judicial, Fiscalía, jueces hasta autoridades de carácter administrativo. De lo que se trata es de construir un tejido social solidario de protección en las regiones, que lentamente vuelva otra vez a generar dinámicas de seguridad y también de paz.
Por consiguiente, yo sí creo que estos frentes perfectamente deberían de llamarse frentes solidarios de seguridad y paz en los territorios. Si no lo hacemos, es permitir que repitamos la triste y desgarradora historia de los años 90.
SEMANA: Pero esto podría interpretarse como un desespero de los ganaderos por la inseguridad en las regiones y porque los criminales están mandando en los territorios.
J.F.L.: Y con un mecanismo bien singular. Llegan a las fincas, tienen una conversación que ya de por sí es atemorizante, preguntan quiénes viven, quiénes son los dueños y preguntan de todo. Al final de eso les dicen miren ustedes tienen que pagar por suma por hectárea o por animales. Y la primera reacción de ese productor rural, de ese campesino o de ese ganadero es negarse a la extorsión, pero días después se presenta un hecho que lamentar. Se roban unos animales, matan otros en los potreros y días después vuelven los mismos a ofrecer seguridad. La seguridad tiene que ofrecerla el Estado y no particulares armados en motos.
Hay que ponerle la cara seria al asunto, yo vengo de tiempo atrás advirtiendo el fenómeno, es que hoy la situación ya se salió de madre. Es muy complicado. La ganadería Iba relativamente bien, estábamos exportando, las cosas se hacían con entusiasmo, la gente estaba volviendo otra vez a mirar el campo como una opción real de progreso y desarrollo, pero esto desanima a cualquiera.
SEMANA: Entonces por eso lanza la propuesta de crear esos frente de seguridad...
J.L.F.: En medio de esa soledad infinita, cómo no tratar de hacer algo para que las autoridades en ese territorio empiecen a tener mayor conciencia de las dificultades que pasan ganaderos y pequeños productores rurales en la zona. Acá deben sumarse todos los sectores para tener una dinámica de protección para los entornos productivos.
SEMANA: ¿Qué responde a quienes dicen que esto sería revivir grupos paramilitares o las Convivir?
J.F.L.: Siempre hay quienes creen que interpretar y construir narrativas que en vez de tener una mirada esperanzadora al futuro, es por el contrario, una narrativa que degrada y que afecta. Si usted identifica los críticos, muy seguramente son los mismos de siempre. Los que auxilian con el silencio o por el contrario, estimulan actores armados con argumentos que cada vez son menos lo ciertos en una sociedad como la nuestra que pese a las dificultades que tienen en democracia, intenta superarlos. Son los mismos que cuestionan cuando la fuerza pública confronta a determinados grupos armados, los mismos que tratan a través de mecanismos muy complejos impedir la acción de la autoridad para que la sociedad pueda tramitar sus diferencias en el marco de la Ley.
SEMANA: Pablo Beltrán del ELN respondió a su propuesta y dijo que ese grupo criminal sabía defenderse solo...
J.F.J.: ¿Defenderse? No hay nada de qué defenderse. Ningún frente va a tener ningún tipo de agresión frente a un tercero. Por el contrario, son frentes solidarios para la construcción de mejores escenarios. Lo claro es que durante 60 años de accionar de este grupo armado, hay muchas víctimas ganaderas y en este momento tenemos tres ganaderos secuestrados presuntamente por el ELN. En consecuencia, nosotros lo que intentamos es vivir en paz.
SEMANA: ¿Pero la declaración de Pablo Beltrán no suena como amenaza?
J.F.L.: Yo supongo que en el próximo ciclo me encontraré con él y tendremos una conversación franca como la que en algunas ocasiones nos ha tocado tener. Allá estarán todos y les contaré.
SEMANA: ¿Cuál será el papel del general (r) Fernando Murillo?
J.F.L.: Es un oficial con una trayectoria impecable, director del Gaula, director de la Dijin y se encargará de las dinámicas que se van a desarrollar mantener buena comunicación y permanente con la fuerza pública, las autoridades, alcaldes y gobernadores. Esto no es nada turbio, esto es de frente y de cara al país.
SEMANA: ¿Ha hablado con alguien del Gobierno Petro sobre esta propuesta?
J.F.L.: No, tuve contacto con el comandante de las Fuerzas Armadas, con el director de la Policía y creo que ese espacio para hablar con el presidente será pronto. Voy a pedir la cita para que el presidente Petro me dé un espacio y explicarle. Tuve también la oportunidad de hablar con el consejero presidencial para la paz que es Otty Patino y fue una conversación muy de fondo. Incluso él fue el que me sugirió que en vez de llamarlo frente solidario de seguridad ganadera, que había que empatar esa ecuación de seguridad y paz y me dijo que fueran frentes solidarios de seguridad y paz.