Entrevista
“Tengo garantizados mis almuerzos en 100 años”: el hijo de Rodolfo Hernández confirmó que se lanza al Senado. Habló de Petro, su herencia y el 2026
Rodolfo José Hernández, hijo de Rodolfo Hernández, habló con SEMANA tras un año de la muerte de su padre. Anunció su campaña al Senado y vaticinó que algunos congresistas apoyados por el ingeniero en 2022 “se quemarán por donde se lancen”.

SEMANA: ¿Aspirará al Senado?
RODOLFO JOSÉ HERNÁNDEZ: Estoy dedicado a nuestra empresa constructora; estamos terminando un edificio en Bucaramanga y una urbanización en el municipio de Socorro (Santander). Sin embargo, tengo el deber de continuar con el legado de mi papá. Siempre estuve a su lado desde el primer día en que decidió meterse en política y hasta su último respiro, por lo que sé cómo pensaba. Fue la mejor universidad que la vida me ha dado, ser su sombra desde 2008. Por eso, sí estoy contemplando ser candidato al Senado, es un buen escenario para comenzar. Creo que en Colombia necesitamos gente libre, que únicamente se deba a los electores, especialmente a los más pobres. Tengo una gran responsabilidad, porque, aunque mi padre ya no está, sus ideas no se pueden perder y su discurso sigue más vigente que nunca.
SEMANA: ¿Con qué capital político cuenta? ¿Los votos se heredan?
R.H.: La mejor herencia que nos dejó mi papá, el ingeniero Rodolfo Hernández, fue su ejemplo. Durante más de medio siglo construyó una empresa exitosa (HG Constructora), una familia unida, y en sus últimos años demostró que en Colombia se puede hacer política sin maquinarias, sin teja, sin ladrillo, sin tamal, sin cemento, sin lechona, sin cerveza y sin plata. Únicamente haciendo las cosas bien, aplicando la lógica, la ética y la estética. Arrancaremos con mi familia, amigos, allegados en Santander y en todo el país. No tenemos que salir a rogarle el aval a ningún político; tenemos el partido Liga de Gobernantes Anticorrupción, que está libre, organizado y listo para participar.
SEMANA: ¿Qué dice su familia? Siempre se dijo que a Rodolfo Hernández lo mató la política.
R.H.: Tengo mi vida arreglada. Como decía mi papá, tengo los almuerzos asegurados por los próximos 100 años (risas). Tengo 42 años, sé a lo que me enfrento, sé que hay que llegar a atacar ladrones, bandidos, corruptos, a quitarles la máscara frente a la ciudadanía y a defender al pueblo. No tengo hijos, no tengo esposa. Mis dos mejores amigos eran mi padre y mi perro Narco José, y los perdí a los dos en menos de 24 horas el año pasado. Mi familia me apoya, sabe que esto lo hago por el honor.
SEMANA: ¿Saldrá a la calle o será una campaña de redes?
R.H.: La gente está en la calle y en las redes. Mire, mi papá arrancó a los 70 años, yo tengo casi 30 años menos; por naturaleza voy a poder esforzarme mucho más. Las redes son mi especialidad. Fui el que le enseñé a manejar iPhone y redes sociales a mi papá, fui el de las ideas de las transmisiones en vivo cuando era alcalde. Tengo una maestría en marketing y llevo 18 años dirigiendo el departamento de mercadeo de la empresa. Todo eso lo vamos a aplicar.

SEMANA: ¿Se quedó con algún secreto de su padre?
R.H.: Les cuento un secreto, pero que no salga de Latinoamérica (risas): mi papá era adicto a la aplicación de celular TikTok siempre que salían videos de Bukele y de Milei. Le encantaban esos videos o los de animales en Discovery. Cuando escuchaba a políticos tradicionales, al finalizar cada video gritaba: “¡Pura mierda!”.
SEMANA: ¿Cree que Rodolfo Hernández pronosticó lo que está ocurriendo con el Gobierno Petro?
R.H.: Mucha gente me dice: “Su papá tenía razón”. ¡El cucho tenía razón! Y así fue. Petro, para ganar, terminó aliado con los que hoy lo manejan. Cuando recordamos lo que mi papá decía del derroche de plata, de Benedetti y Roy Barreras, de las reformas tributarias, de cómo estaría Colombia, vemos que coincide con la realidad. Triste coincidencia.
SEMANA: Si Rodolfo Hernández hubiera quedado presidente, habrían convocado a otras elecciones por su salud.
R.H.: Estoy seguro de que el haber perdido las elecciones aceleró la enfermedad de mi padre. Él estaba seguro de que iba a ganar. Es que haga las cuentas: eran 5 millones de votos de Federico Gutiérrez en primera vuelta y 6 millones de votos de Rodolfo Hernández contra 8 millones de Gustavo Petro. Las cuentas daban para que Rodolfo sacara 11 millones en segunda vuelta y a Petro le quedaba casi imposible. Mi papá terminó con 10,6 millones de votos y a Petro le aparecieron 3 millones más. ¿Usted sabe cómo salen 3 millones de personas más a votar? A punta de plata, de entregar ministerios al Partido Liberal, a los conservadores, al Partido de la U, a los verdes. Ahí vimos el resultado. Ese no era el diseño de la campaña de mi papá y por eso perdimos. Mucha gente le echa la culpa a mi padre, cuando hizo todo lo que estaba en sus manos para ganar, a pesar de las amenazas. La gente que le votó a Fico y a Rodolfo cumplió, los votos salieron, pero las fuerzas oscuras se movieron con plata y acuerdos, y nos ganaron.
SEMANA: ¿Siguen pagando abogados y defendiéndose de la justicia, pese a que su padre falleció hace un año?
R.H.: La persecución judicial contra mi papá fue más dura que contra cualquier colombiano. Pero de los casi 400 procesos judiciales quedaron menos de 30, es decir, eran solo para empapelarlo y joderle la vida. Uno de ellos porque les dijo gordos a unos bomberos y están pidiendo más de 3.000 millones de pesos en daños y perjuicios. ¡Están locos! Con la barriga hasta las rodillas y quieren que les digan flacos. Pero como ese proceso va contra el patrimonio, nos toca seguir defendiéndonos.

SEMANA: ¿Qué pasó con los bienes de su hermana Juliana Hernández Oliveros, desaparecida hace 21 años?
R.H.: Eso aún está en un juzgado, el proceso de muerte por desaparición. Tenía a nombre de ella un apartamento y unas acciones en la empresa. Hay que esperar el resultado de ese proceso judicial; eso se ha demorado mucho. Era muy joven cuando la secuestraron, solo tenía 27 años y no alcanzó a tener hijos. En ese caso, lo que le correspondía a ella por parte de mi padre, entre ello el apartamento, se entregará a mi mamá y a nosotros, los hermanos, por partes iguales.
SEMANA: ¿En qué terminaron las más de 400 investigaciones que tenía Rodolfo Hernández?
R.H.: En Colombia, el sistema está diseñado para que quien se oponga lo empapelen y para que a los bandidos nunca les pase nada. Se demostró que todas las denuncias eran temerarias. Mi papá se fue con el dolor de una sentencia injusta, de primera instancia, por lo que llaman Vitalogic, que nunca existió. Un juez con el testimonio de un bandido, sin ninguna prueba de corroboración, en primera instancia emitió una condena que fue apelada en su momento. Lastimosamente, mi papá se fue y no logramos seguir con esa batalla. La sentencia nunca quedó en firme porque teníamos todos los argumentos para defendernos y apelamos ante el tribunal. La apelación quedó registrada en las redes de mi papá para que cualquier ciudadano pueda entrar y revisar la injusta condena.
SEMANA: ¿Volvió a hablar con Marelen Castillo, la fórmula vicepresidencial de su papá?
R.H.: No he vuelto a hablar con ella. Me parece importante que no se haya arrodillado ante la mermelada de Petro y se haya mantenido firme en defensa de la gente. Es valioso.
SEMANA: En Santander competirá duro contra Jota Pe Hernández al Senado.
R.H.: Mi papá, el día de las elecciones al Congreso en marzo de 2022, contó públicamente ante los medios de comunicación que iba a votar por Jota Pe y dio el partido y el número. Lo hizo sin cálculo político. En segunda vuelta, Jota Pe se retiró de la campaña de mi papá y públicamente dijo que no nos iba a apoyar porque la gente de Federico Gutiérrez nos iba a votar. Hoy el escenario es diferente y mi único enfoque es continuar con el legado de mi padre.

SEMANA: ¿Cuál será el futuro de Érika Tatiana Sánchez Pinto y Juan Manuel Cortés Dueñas, respaldados por Rodolfo Hernández en 2022?
R.H.: Se van a quemar por donde se lancen, no tienen votos, los votos eran de mi papá. Están entregados al Gobierno, aprovechando el cuarto de hora que no les volverá. Me dicen que Juan Manuel Cortés quiere lanzarse al Senado por el Partido Verde. Ojalá lo haga para que quede en el pabellón de quemados.
SEMANA: ¿Por qué recibió a Petro en Bucaramanga con una pancarta diciendo “Petro ganó con trampa’’?
R.H.: Porque es la verdad. El hijo de Petro se refirió a la plata que recibió del Hombre Marlboro. Benedetti contó borracho en una llamada sobre otros 15.000 millones. El hermano del presidente mencionó el Pacto de La Picota. Toda Colombia vio cómo les repartieron los ministerios al Partido Liberal, a los conservadores, al Partido de la U, a los verdes, a los que estuvieron con Fajardo. Iván Mordisco, de las Farc, contó que le ayudó. El CNE ha encontrado que superaron en más de 2.000 millones los topes de campaña. Fecode aceptó que le entregó 500 millones, etcétera. ¿Le parece poco? Y la dinámica ha sido echarle la culpa a mi papá. Por eso, reafirmo: Petro ganó con trampa, toda Colombia lo sabe. En unas elecciones transparentes no se hubiese ni asomado por la presidencia.
SEMANA: ¿Petro pondrá presidente?
R.H.: Tiene una porción del país, la chequera del Estado y el poder de la presidencia. Hoy, con todo eso, no le alcanza, pero no está nada lejos. Colombia no se puede confiar.
SEMANA: Le daré algunos nombres de precandidatos y defínalos con una frase. Vicky Dávila.
R.H.: Periodista valiente.
SEMANA: Sergio Fajardo
R.H.: Acomodado.
SEMANA: Claudia López
R.H.: Es la Roy Barreras del Partido Verde.
SEMANA: Gustavo Bolívar
R.H.: Novelero.
SEMANA: Abelardo de la Espriella
R.H.: Showman.
SEMANA: Miguel Uribe Londoño
R.H.: Sin palabras.