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NACIÓN

La familia Ambuila, la del lujoso Lamborghini, seguirá libre

Pese a la apelación de Dian por medio de una acción de tutela, seguirán libres por vencimiento de términos.

4 de junio de 2020

Jenny Ambuila, famosa por sus excéntricas fotos disfrutando de lujos como vehículos Lamborghini, su padre Ómar Ambuila y Elva Chará Gómez, su esposa, seguirán en libertad.

El pasado 14 de mayo un juez los había dejado en libertad por vencimiento de términos. Sin embargo la Dian, que aparece como víctima en el proceso, interpuso una tutela en los últimos días solicitando al Tribunal de Cali para que revocara esa decisión y ordenara de manera inmediata nuevamente la detención de la familia Ambuila.

En la tutela se argumentaba, entre otras cosas, la necesidad de que los investigados permanecieran bajo la medida de aseguramiento decretada inicialmente por un juez mientras continúa la investigación.

Sin embargo, el Tribunal de Cali consideró que la decisión del juez que los dejó libre se ajustaba a la ley y deben seguir en libertad por vencimiento de términos.

El juez, que los dejó en libertad argumentó en su momento lo siguiente: “Procede a desatar el recurso de apelación interpuesto por el abogado defensor contra la decisión que se tomó en audiencia pública del 22 de abril de 2020 ante el Juzgado Veinticuatro (24) Penal Municipal de Cali con funciones de control de garantías, en la que negó la solicitud de libertad por vencimiento de términos”, explicó el juzgado 5.

Con esta determinación quedó revocada en segunda instancia la medida de aseguramiento impuesta en primera por el juez penal. La defensa de la familia Ambuila ha reiterado que la decisión se ajustó a la ley y que ellos están dispuestos a acudir a la justicia cuando sean requeridos porque insisten en su inocencia frente a los cargos que le ha imputado la Fiscalía.

Los implicados habían sido capturados en abril de 2019 por el caso de presunta corrupción al interior de la Dian en Buenaventura. Las autoridades se habían alertado sobre posibles irregularidades por las publicaciones de redes sociales de Jenny Ambuila. Era evidente que detrás de los lujos de los cuales se jactaba había algo que no cuadraba en las cuentas de la familia. Ambuila Chará posteaba en sus redes sociales la excéntrica vida que se daba con la plata ilegal que, según la Fiscalía, obtenía su padre dejando pasar contenedores de contrabando.

Durante el proceso se conocieron unos audios en los que Ómar Ambuila llamaba la atención a su esposa para que su hija dejara de publicar su vida en las redes.

En una de las grabaciones Ómar Ambuila le dice a su esposa Elba Chará que tiene un “problema muy serio con eso de Jenny”.

El 29 de marzo la Fiscalía dio a conocer las capturas y dijo lo siguiente sobre la supuesta responsabilidad de los miembros de la familia Ambuila:

Vehículos deportivos de gama alta, altas transacciones en dólares a Estados Unidos, compra de costosos accesorios, viajes y fiestas hacían parte de las múltiples actividades detectadas por la Fiscalía General de la Nación y que no han podido ser justificadas por los presuntos integrantes de una organización criminal dedicada al contrabando ni por algunos de sus familiares, que ostentaban los lujos en el extranjero.

Durante más de un año, un equipo especializado de la Dirección contra el Lavado de Activos de la Fiscalía, con apoyo de agencias de los Estados Unidos, descifraron un esquema de corrupción que estaría en cabeza de dos funcionarios de la Dian, quienes habrían permitido el ingreso ilegal de toneladas de mercancía por el puerto de Buenaventura.

Ómar Ambuila, jefe del Grupo Interno de Trabajo de Control de Carga de la Dian en la terminal marítima, y Emilson Moreno Granja, funcionario de la misma dependencia, de acuerdo con el material probatorio recaudado, presuntamente aprovecharon sus cargos para manipular los contenedores y alterar el contenido, o permitir que cruzaran sin ningún control aduanero.

A cambio de su ilícito actuar, estas dos personas y otros señalados cómplices habrían recibido millonarios ingresos que se ocultaron a través de la constitución de empresas fachada o fueron girados a sus familiares para que adquirieran bienes y servicios que superarían su capacidad económica.

Por ejemplo, estaría demostrado que los dos funcionarios no tenían salarios superiores a los 6 millones de pesos; sin embargo, registraron ingresos y compras por montos muy superiores de los que nunca ha existido claridad sobre su origen.