Turismo
El municipio más alto de Nariño, rodeado de valles, morros, ríos y reservas; ideal para el ecoturismo a 2 horas de Pasto
También es un destino perfecto para el turismo religioso, ya que cuenta con maravillosos templos y celebraciones representativas de esta práctica.
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El departamento de Nariño, ubicado en el suroeste de Colombia, se destaca por su diversidad geográfica y cultural, convirtiéndose en un destino turístico imperdible, especialmente para aquellos que buscan disfrutar una conexión profunda con la naturaleza y planes de aventura únicos.
Aunque es conocido popularmente como el hogar del famoso Carnaval de Negros y Blancos en Pasto, declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, una celebración llena de color, música y tradición que refleja la mezcla de culturas indígenas, afrocolombianas y mestizas, este destino, al igual que muchos otros en el país, cuenta con una lista de encantadores lugares para visitar en su territorio.
En esta lista se encuentra el municipio de Guachucal, rodeado de valles, morros, ríos y reservas; ideal para el ecoturismo y el turismo religioso, ubicado a aproximadamente a 99 kilómetros de Pasto, lo que representa un viaje en carro de unas 2 horas.
Gracias a su ubicación geográfica, esta población cuenta con áreas naturales que preservan y conservan el ambiente y el bienestar de las comunidades que se encuentran asentadas en el lugar, destaca la alcaldía municipal en su página web.

Por esta razón, los amantes de la naturaleza se suelen sentir atraídos con la belleza de sus escenarios bañados por aguas y con exuberante vegetación que, además, ofrecen la oportunidad a vivir experiencias únicas e inolvidables.
Estos entornos naturales son el foco central de sus comunidades indígenas y demás habitantes, que trabajan con mucho esfuerzo a diario para mantenerlos intactos o recuperar aquellos que se han visto afectados por diferentes factores.
Por otro lado, debido a sus tradiciones, atrae cada año a miles de feligreses gracias a las diversas celebraciones religiosas que se celebran a lo largo del año, algunas en sus maravillosos templos; uno famoso por su antigüedad y dos conocidos por sus modernas construcciones que destacan las figuras católicas que allí se veneran.

“Guachucal es un sitio de una intensa y ferviente vocación religiosa, con profundas raíces católicas, resultado del proceso de evangelización y catequización que se ha venido manteniendo de generación en generación”, señala la misma entidad.
En ese pueblo se le rinde homenaje a la Virgen del perpetuo Socorro, Muellamués a San Diego de Alcalá de Henares y en el corregimiento de Colimba a la Virgen del Rosario.
De sus festividades, se destaca la fiesta patronal de la parroquia es de San Juan Bautista y la fiesta patronal de los motoristas de la Virgen del Perpetuo Socorro, en el mes de agosto. En diciembre, se inician las fiestas con las vísperas religiosas de la Inmaculada, el 7 de diciembre.

El 24 de diciembre (paso del Niño Jesús), el 27 y 28 de diciembre (juego con agua de Santos Inocentes), el 31 de diciembre (Años viejos), el 4 de enero (Carnavalito), el 5 y 6 de enero (Carnaval de negros y blancos).
Las fiestas religiosas que se celebran en cada año son: Niño Jesús de Praga, Sagrado Corazón de Jesus, San Juan Bautista, Virgen del Perpetuo Socorro, Inmaculada, Niño Jesús, San José.
Como el municipio más alto de Nariño, Guachucal está situado a 3.180 metros sobre el nivel del mar, siendo el segundo municipio más alto de Colombia después de Vetas, en Santander.
No obstante, su clima frío y su ubicación en el Nudo de los Pastos convierten en un lugar ideal para el turismo ecológico y cultural.