| Foto: León Dario Peláez / SEMANA.

Covid-19

Así será la vacunación contra la covid-19 de los habitantes de calle

Como ciudadanos, las personas que no tienen un techo tendrán el derecho a recibir la vacuna. Los municipios deberán crear estrategias de identificación.

8 de febrero de 2021

El Plan Nacional de Vacunación contempla que 35 millones de colombianos reciban la vacuna contra la covid-19, con el objetivo de lograr la inmunidad de rebaño.

De acuerdo con el decreto que establece los detalles del plan, el Ministerio de Salud organizó a la población en dos fases, cada una con cinco etapas, de acuerdo con sus condiciones de riesgo frente a la enfermedad ocasionada por el virus SARS-CoV-2.

Vacunación en casa
Vacunación en casa | Foto: GettyImages/E+/ArtistGNDphotography

En la primera fase la idea es reducir la mortalidad por la enfermedad, reducir la incidencia de casos graves por covid-19 y proteger el talento humano en salud; en la segunda, el objetivo es lograr la disminución de los contagios.

Inicialmente, para la fase 2, el Plan Nacional de Vacunación propone la protección de los cuidadores de personas con necesidades específicas o de alta vulnerabilidad, como los cuidadores institucionalizados (entre ellos cuidadores en hogares geriátricos y madres comunitarias).

Además, en esta fase también se busca prevenir la transmisión general en la población para lograr una reducción en la incidencia general de casos, “con especial atención a los contextos con mayor riesgo de brotes, como las personas privadas de la libertad, guardias del Inpec, policías, militares y población en condición de calle”, según dice el documento oficial del plan.

Gerson Bermont, director de Promoción y Prevención del Ministerio de Salud y Protección Social, aseguró que el Plan Nacional de Vacunación está articulado bajo los principios de equidad, eficacia y eficiencia, “estipulados en la Ley Estatutaria de Salud; es decir, dependiendo de los criterios, todos los ciudadanos tendrán acceso a la vacuna”.

Los habitantes de calle son personas que suelen tener barreras de acceso a la información, que se encuentran en un grado de vulnerabilidad y que en un gran número tienen mayor prevalencia de enfermedades graves o crónicas, así como trastornos de salud mental por consumo de sustancias psicoactivas que dificultan su comprensión y adhesión a las medidas de prevención del contagio del coronavirus.

Guantes y jeringas, insumos básicos en el proceso de vacunación
Guantes y jeringas, insumos básicos en el proceso de vacunación | Foto: Secretaría de Salud de Bogotá

Sin embargo, como se trata de personas que en ocasiones no cuentan con documentación o una identificación, es tarea de las Secretarías de Salud municipales generar planes y estrategias, que revisará el Gobierno nacional para censar y ubicar a los habitantes de calle.

Bermont explicó que, además, los entes territoriales deberán establecer y poner en práctica tácticas para garantizar que la información llegue a esta población y asegurar su acceso a la vacunación.

¿Por qué hay priorización en la vacunación?

El documento del Plan Nacional de Vacunación explica que los países necesitan crear estrategias de priorización para la aplicación de las vacunas, debido que no habrá suficientes, al menos inicialmente, para inmunizar a la totalidad de los habitantes. Además, no sobra recordar que la estrategia para llegar a cada rincón de un país, especialmente uno como Colombia, no es tarea sencilla y es un reto operativo.

De hecho, hasta “los países que han asegurado dosis suficientes para vacunar a toda su población deben establecer un plan de priorización debido a razones operativas y a la gradualidad en la entrega de los biológicos”.

De ahí que se hable de fases y etapas de inoculación, en las que aparecen cantidades específicas de personas, algo que permitirá que quienes necesitan el biológico con más urgencia, lo reciban en el menor tiempo posible.

El Gobierno nacional –explica el documento– se basó en sus planes para la primera fase de vacunación, al igual que en otros países, en los siguientes principios:

- Reducir la morbilidad grave y la mortalidad.

- Reducir la transmisibilidad y las repercusiones sociales negativas de la transmisión del SARS-CoV-2.

- Contar con una implementación fácil y comprensible por todas las audiencias.

- Reflejar principios sociales y éticos ampliamente aceptados.

- Diseñar una aplicación fiable en términos operacionales.

- Reconocer los juicios científicos y éticos en su aplicación, y evitar la discriminación y las desigualdades.