Mascarilla
La sábila es conocida por ser una aliada para la belleza y el cuidado personal. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Vida moderna

Colágeno y sábila: así se pueden aplicar en la piel para reducir arrugas

Las mascarillas caseras son una alternativa para cuidar la piel.

8 de febrero de 2022

El colágeno es una de las palabras clave en el mundo de la belleza. Esto se debe a que es una de las proteínas encargadas de brindar elasticidad y tensión a la piel. Pero no solo está allí. También está presente en las uñas, los huesos, ligamentos y tendones. Cada capa de la piel tiene tejido conectivo, que está compuesto por varias capas de colágeno, para dar soporte. Así mismo, estas capas contienen fibra de elastina, que brinda fuerza y elasticidad. Con el paso del tiempo, su producción se disminuye en el organismo y se hacen más visibles las arrugas.

Por su parte, la sábila es popular por sus usos medicinales, para la afecciones relacionadas con la digestión. Además, es uno de los ingredientes principales en productos para el cuidado de la piel. Sus propiedades contribuyen al bienestar de la salud cutánea.

Las mascarillas caseras se han convertido en una de las formas más frecuentes para mantener una piel sana. Algunos de los ingredientes que las personas utilizan comúnmente para hacer mascarillas caseras son: aloe vera, sábila, avena, miel, azúcar, entre otros.

El portal Panorama destaca los beneficios de una mascarilla de colágeno y sábila para el tratamiento de las arrugas, especialmente para las pieles maduras. “Con esta mascarilla de colágeno y aloe vera verás resultados de inmediato, pues tu rostro lucirá fresco y con algunos años menos”, detalla el sitio web.

Ingredientes

  • 1 cucharada de colágeno en polvo.
  • 1 cucharada de arcilla rosa.
  • 1 cucharada de gel de aloe vera.
  • ½ cucharada de miel de abeja.

Preparación

  1. En un recipiente, mezclar el colágeno y la arcilla.
  2. Luego, añadir el gel de aloe vera y la miel.
  3. Revolver muy bien para obtener una crema homogénea.
  4. Lavar y secar muy bien el rostro antes de aplicar el tratamiento.
  5. Aplicar la mascarilla, con una brocha preferiblemente, y frotar la mezcla en el cuello y escote.
  6. Dejarla actuar por 15 minutos.
  7. Enjuagar con mucha agua tibia.
  8. Finalizar el tratamiento aplicando crema hidratante. Se debe repetir tres veces a la semana para mejorar los resultados.

¿Cómo incluir el colágeno en la alimentación?

La vitamina C es una de las mejores alternativas para estimular la producción de colágeno. En la alimentación se pueden incluir alimentos ricos en vitamina C, como los cítricos, el kiwi, las fresas y la guayaba. Es fundamental consumir estas frutas periódicamente para garantizar un mejor resultado. El portal Salud 180, señala algunos de los beneficios que brinda el colágeno a la piel.

¿Qué beneficios tiene el colágeno?

  • Cicatrización: el colágeno contribuye a la creación de tejido nuevo. Por eso, cuando se tiene alguna lesión en la piel, esta proteína contribuye a una buena curación.
  • Artritis: según una investigación de la Universidad de Harvard, el colágeno que es extraído de cartílago funciona como un calmante para disminuir el dolor y la hinchazón en las personas que sufren de artritis.
  • Osteoporosis: el consumo de colágeno contribuye a la fijación del calcio en los huesos. Incluirla en la alimentación disminuye el riesgo de padecer osteoporosis.
  • Uñas: el colágeno fortalece las uñas y ayuda a que crezcan sin romperse.

Tratamiento estéticos para las arrugas

Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, explica algunas de las opciones a las que pueden recurrir las personas para disminuir las arrugas y lucir una piel joven:

  • Tretinoína (Retin-A) o las cremas que contengan alfa-hidroxiácidos (tales como ácido glicólico).
  • Quimioabrasión, la exfoliación por láser, o la dermoabrasión (especialmente para las arrugas prematuras).
  • Toxina botulínica (bótox), este es uno de los más populares. Se utiliza para la corregir algunas arrugas provocadas por los músculos faciales que son muy activos.
  • Algunos medicamentos, que son inyectados debajo de la piel para la estimulación de la producción de colágeno.
  • Cirugía plástica.