Los síntomas que se pueden son ardor, acidez, eructos, distensión gaseosa, flatulencia, presión abdominal o sensación de plenitud.

SALUD

Buñuelos y natilla: cómo lidiar con esa llenura

Muchos suelen excederse con el consumo de los manjares navideños. Esto podría traer problemas en la salud pero como explica un experto, esto se puede evitar si se toman las decisiones correctas a la hora de comer.

15 de diciembre de 2017

Antes de lanzarse sin pudor al placer de los buñuelos, la lechona, los tamales, los postres o cualquier alimento que abunde durante la Navidad, piense muy bien en las consecuencias de esa decisión. Si lo hace sin limites es posible que estas delicias, que tambien son altas en grasa, demasiado dulces, picantes o con muchos conservantes, le generenllenura y malestar. Según Baltazar Guerrero, médico epidemiólogo, la consulta principal en los primeros 15 días de enero es de pacientes que llegan con arrepentimiento por el aumento  de peso y por síntomas gastrointestinales que le impiden llevar una vida normal. Esto se da por “el alto contenido de sustancias irritantes para el cuerpo”, dice el experto. Esos síntomas no necesariamente indican una enfermedad, pero “si nos van a generar diferentes malestares en nuestro día a día”, añade.

Esta molestia suele conocerse como dispepsia funcional y según explica el experto “es un trastorno gastrointestinal que altera tanto la secreción, la movilidad y lasensibilidad de nuestro sistema gastrointestinal”. Los síntomas que se pueden son ardor, acidez, eructos, distensión gaseosa, flatulencia, presión abdominal o sensación de plenitud. En casos más complejos el paciente podrían sentir náuseas o incluso dolor. Según Guerrero, en estos casos se debe consultar con el médico porque puede haber un riesgo de deshidatación. En ese momento, “la dispepsia deja de ser un síntoma funcional y empieza a estar asociado a la presencia de enfermedades gástricas un poco más complejas como una úlcera o la gastritis”, dice.

Para evitar situaciones así, el experto recomienda lo siguiente:

- Evite el exceso: Sobrepasarse con la comida es el error más común y el que causa los molestos síntomas de la dispepsia. Por ello, la regla de oro durante esta Navidad, y en general para todos los días, es comer hasta que suspire; esa será la señal de que ya está satisfecho y debe frenar la ingestia. En cuanto a la frecuencia, explica el experto que “a veces la gente comete el error de que solo comen una vez al día, pero en esa comida se comen el volúmen equivalente a las otras comidas. Eso está mal y puede generar un cuadro de dispepsia funcional”. Por ello, hay que tratar de consumir en volúmenes pequeños pero más seguidos. Con eso además tendrá una sensación constante de placidez, lo que le ayudará a evitar el exceso. 

- Planifique las comidas: Debe estar consciente de que las celebraciones de navidad y fin de año se extienden durante todo el mes. Serán hasta 15 días en los que no solo va a comer muchos alimentos que irritan el estómago, sino que quizá se sienta con la licencia de saltarse las comidas. La recomendación es que, primero decida a cuáles eventos asistirá y aliste su organismo: si, por ejemplo, va a cenar, trate de comer ligero durante el día. Por su parte, hay que recordar que estos alimentos son de difícil digestión y de acuerdo a lo que consuma va a ser más sencillo o difícil recuperarse. “Si solamente fue un día en el que se excedió con esa alimentación, es un paciente que después de 48 horas va a estar mucho mejor”, explica Guerrero.“Pero si es una persona que tuvo estos excesosmás tragoentre 8 y 15 días así, es un paciente cuyo proceso inflamatorio va a ser un poquito mayor y podemos tener tratamientos de 2 a 3 semanas para poderlo estabilizar”, añade. 

- Ponga sobre la mesa opciones saludables: Hay que cambiar el chip y hacerle saber a las personas que no porque sea Navidad todo vale.Lo que yo hago es decirle a las personas que en lugar de darme dulces me regalen mejor una fruta o me ofrezcan un jugo sin azúcar”, cuenta el experto. Hay que preparar cenas con ingredientes que no sean tan dañinos. “Las frutas y las verduras tienen que consumirse con el estómago vacío. No pueden acompañarse de proteína o harina porque no se van a absorber. Incluso pueden causar daño o síntomas asociados a la dispepsia”, dice. Estos dos grupos de alimentos debeser consumido aparte y de forma natural sin añadir queso, yogurt o salsas porque “dañan el alimento”. Otro punto que rescata el experto es acompañar los alimentos con agua, “preferiblemente tibia porque el calor va a hacer que tengamos una mejor digestión”, dice.

- Mejor evitarlos: El experto recomienda dejar un poco el consumo de trigo por el tema del gluten que para muchos puede resultar perjudicial. Además, “retirar de la dieta o disminuir al máximo el consumo del azúcar, la gaseosa, los jugos artificiales, que es lo que más inflama a los pacientes” afirma. También recomienda disminuir el consumo de embutidos como jamones, chorizos, salchichas, “porque a parte de ser muy procesados, pueden tener diferentes derivados, inclusive del petróleo, que van a causar intoxicación”, afirma Guerrero.

- No automedicarse: “Los pacientes que llegan con síntomas de dispepsia son casi el 40 por ciento de la consulta en esta época y solo el 50 por ciento de ellos acude al médico”, cuenta Guerrero, “el otro 50 por ciento lo que hace es ir a una droguería y se automedican con antiácidos o diferentes medicamentos que podrían provocar efectos secundarios si se abusa de ellos”, agrega. Por ello, lo mejor es tener en cuenta la moderación para consumir los alimentos, preferir los más saludables y respetar los horarios de comida. Si los síntomas resultan muy intensos, se debe consultar al médico.