| Foto: Archivo SEMANA

SALUD

Las enfermedades de la selva

Al igual que el impacto psicológico, otras de las secuelas para quienes han vivido muchos años en la selva, son los cambios físicos y la posibilidad de haber desarrollado enfermedades que requieren tratamiento especial.

2 de abril de 2012

Detrás de la sonrisa de un recién liberado se esconde un cuerpo destruido que ha sufrido el rigor del clima, la mala alimentación y las heridas de la selva. Para muchos, lo más impactante es ver a las personas que regresan del secuestro, bajarse de las camas a media noche y dormir en el piso. El cuerpo se acostumbra a condiciones extremas y volver a adquirir ciertas costumbres, como dormir en una cama, es un proceso largo que requiere paciencia y comprensión.

El Hospital Militar en Bogotá y la Clínica de la Policía son los dos centros especializados en la atención de los recién liberados. Cada una de estas instituciones cuenta con un grupo interdisciplinario que se encarga de evaluar y tratar a estos pacientes. Los grupos están formados por médicos internistas, cirujanos, nutricionistas, fisioterapéutas, psicólogos y psiquiatras, y según cada caso se solicita la intervención de otra especialidad.

"El proceso inicial de exámenes y tratamientos puede tomar entre cinco y siete días. En éste período se toman exámenes de diagnóstico y se prepara a la persona para que pueda reiniciar su vida en comunidad" asegura uno de los médicos. Como todo proceso en medicina, existe un protocolo de exámenes de diagnóstico que se cumple estrictamente para determinar el estado de salud de cada persona.

Estado Nutricional

El régimen de alimentación en cautiverio provoca una desnutrición crónica que debe ser tratada. Mientras el porcentaje de grasa corporal en una persona sana puede estar entre el 18% y el 21%, en estos pacientes es del 5% o 7 %, lo que significa que han quemado todas sus reservas de tejido graso. Inicialmente los pacientes reciben dietas altas en calorías pero con proteinas restringidas. Cualquier estado nutricional deficiente puede causar alteraciones hormonales que requieren de tratamiento.

Lesiones de piel

Las largas caminatas en la selva y las lesiones por traumas o heridas por animales, pueden causar lesiones en la piel que en la selva no logran sanarse. Muchas pueden estar infectadas y el mal estado nutricional retarda su cicatrización.

Infecciones

En la selva se pueden adquirir enfermedades infecciosas como leshmaniasis, leptospirosis, malaria y mal de chagas entre otras. Estas infecciones requieren ser tratadas para evitar complicaciones más graves y el compromiso de órganos como el hígado y el riñón. En algunos pacientes que han tenido enfermedad de Chagas, pueden presentarse secuelas irreversibles en el corazón, en el colon o en el esófago que pueden convertirse en problemas serios para la salud inclusive hasta causar la muerte.

En la evaluación inicial, según cada paciente, se toman exámenes para descartar infecciones o exposición hepatitis, sida y otras infecciones. Traumas y fracturas. La historia clínica de cada paciente es importante. Se interroga a cada uno sobre traumas, golpes y caídas para identificar fracturas o lesiones que no han sido correctamente tratadas o que han dejado alguna limitación física.

La etapa inicial de atención se continua con exámenes y controles periódicos para garantizar la adecuada evolución de cada persona. En cautiverio, el daño psicológico causa grandes cambios en cada persona, pero, igualmente el cuerpo sufre enfermedades y traumas que dejan secuelas para toda la vida.