Un dermatólogo inglés le dijo a Anne Pusglove que durante su experimento de un mes, la piel había envejecido 10 años. | Foto: Daily Mail.

EXPERIMENTO

Un mes durmiendo con maquillaje envejece hasta 10 años

Durante 30 días una periodista británica comprobó los nocivos efectos de no retirarse el maquillaje en las noches.

31 de julio de 2013

En una encuesta reciente a mujeres en Europa se les preguntó si se quitaban el maquillaje en las noches. Un tercio de ellas dijo que al menos dos veces a la semana no se limpiaban el rostro antes de dormir.

La pereza o el sueño fueron los principales factores por los cuales las mujeres reconocieron omitir la limpieza nocturna, a pesar de que dicen ser conscientes de que dormir con el maquillaje reseca la piel, genera manchas, hace más frágiles las pestañas y que incluso envejece la piel.

Las ocupaciones diarias de una mujer ejecutiva o una ama de casa hacen que la rutina de limpieza sea lo último en un listado de prioridades. Pero la periodista británica Anne Pursglove decidió asumir un reto: comprobar qué tan dañino es en realidad para una mujer dormir con maquillaje, y para ello, decidió no retirarlo durante un mes.

Pursglove durmió con los polvos, bases y sombras sobre su cara durante 30 noches y solo se lavaba el rostro con agua en las mañanas para posteriormente aplicarse de nuevo el maquillaje.

Con el objetivo de medir objetivamente los cambios que se presentaban sobre su piel decidió visitar al doctor Nick Miedzianowsky en el estudio de imagen cosmética 3D en el centro médico Anne Queen. El doctor analizó la piel con una cámara especial 3D que muestra en detalle la pigmentación, los capilares rotos, los poros dilatados y las arrugas.

Antes de iniciar el proceso, los datos de la piel de la periodista de 40 años fueron comparados con el promedio de las mujeres de la misma edad, para obtener un resultado porcentual. El experto también tomó medidas de la humedad del rostro para determinar qué tanto reseca la piel el grupo de productos que se utilizan sobre la piel.

Anne utilizó la base 3 en 1 Max Factor Face Finity, la pestañina DiorShow, el delineador de ojos L’oreal eyeliner y el brillo de labios Guerlain.

Al tercer día, la periodista empezó a ver unos pequeños quistes blancos alrededor de las pestañas y sentía la piel tan seca, como si tuviera una máscara encima. Días más tarde varios amigos le dijeron que tenía apariencia de cansancio.

Al inspeccionar la piel en un espejo de aumento, la superficie se veía escamosa y con bultos. Cada vez se hacía más difícil la aplicación de la pestañina y sus pestañas se habían juntado en dos grandes grupos.

Con el paso de las semanas sus labios se resecaron y la piel de las comisuras de los labios se desquebrajó. Anne estuvo a punto de dejar de usar la pestañina, pues estaba arrancando sus pestañas, incrustándose en sus ojos y causándole infecciones oculares, por lo que temía sufrir daños irreparables.

Los poros de su nariz se obstruyeron y sus párpados y mejillas tomaron un color rojizo. 

Para una revisión objetiva, Pusglove acudió de nuevo a la cámara del doctor Miedzianowsky y le solicitó la lectura de los resultados a la dermatóloga Stefanie Williams, directora de la Clínica dermatológica europea de Londres.

Los efectos:

Parches dolorosos

La cámara mostró que la textura de la superficie de la piel era de alrededor del 10 por ciento peor (es decir, más desigual) en la frente y en el lado derecho.

El lado izquierdo empeoró en un 20 por ciento ya que la periodista duerme hacia ese lado y la falta de oxigenación de la piel empeora los efectos.

El no uso de lociones limpiadoras dio lugar a una piel reseca y una caída del cinco por ciento en los niveles de humedad. “Una capa de maquillaje también evita la regeneración de la piel, lo que frena el proceso de renovación y da como resultado una textura desigual", afirmó la especialista.

Piel rojiza

La piel de la periodista de 40 años era sensible y propensa al enrojecimiento y eso había quedado escrito en la evaluación previa al experimento.

Sin embargo, el uso de maquillaje afectó esta condición, pasando de un seis  a un ocho por ciento en un enrojecimiento superior al de las mujeres promedio. “Dormir con el maquillaje tiene un efecto oclusivo (que forma una barrera sobre la superficie de la piel). Esto significa que los agentes irritantes son encerrados, exacerbando las reacciones alérgicas”, comentó Williams.

Los poros

Las imágenes mostraron que los poros eran alrededor de cinco por ciento más grandes de lo que eran al principio. “La suciedad en los poros no sólo los hace más visibles y por lo tanto más grandes, sino que con el tiempo, en realidad se estiran", afirmó la dermatóloga.

Sin embargo, el agrandamiento de los poros también significa que la piel envejeció durante el mes de experimento.

“Las personas mayores tienen poros más grandes, ya que con la edad la elasticidad disminuye por lo que las estructuras que soportan la piel se aflojan”, añadió.

Las conclusiones de los expertos

Los expertos estimaron que la piel de Anne Pusglove era biológicamente una década más vieja que antes de que empezara el experimento.

La periodista quedó atónita cuando recibió el resultado. “Estoy aterrorizada de que el daño pueda ser permanente. ¿He arruinado mi piel y mi aspecto para siempre?” se preguntaba Pusglove.

Afortunadamente, el dermatólogo estético Sam Bunting la tranquilizó. “No hay ningún daño significativo en cuatro semanas. Pero evitar a largo plazo la limpieza de la piel sin dejar de usar maquillaje podría ser perjudicial a largo plazo”, le dijo el experto.

"El mayor problema es la acumulación de contaminantes ambientales, que conducen a la generación de radicales libres que contribuyen a la descomposición del colágeno y la elastina, las estructuras que mantienen joven la piel”, agregó.

Una vez finalizó su experimento, Anne Pusglove llegó a una sola conclusión: “Por más ocupada que esté antes de dormir, mi prioridad será limpiarme el rostro y eliminar el maquillaje que usé en el día” afirmó al concluir su informe para el DailyMail.