Medicina
La falta de calcio puede afectar significativamente la salud de la estructura ósea. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Bienestar

Niveles bajos de calcio: estos son los síntomas, causas y tratamiento

Calambres musculares, insomnio, problemas dentales como las caries, caída del cabello, uñas quebradizas y debilidad ósea pueden ser señales de insuficiencia de este mineral en el organismo.

21 de septiembre de 2021

El calcio es un mineral fundamental para el fortalecimiento de la estructura ósea, pero también cumple otras funciones muy importantes en el organismo, como su aporte en la coagulación de la sangre.

De igual forma, este mineral es fundamental para el funcionamiento correcto de los nervios, los músculos y el corazón. Aproximadamente el 99 % del calcio del cuerpo se almacena en los huesos, mientras el restante 1 % circula en la sangre. Una cantidad excesiva o insuficiente de calcio en la sangre podría ser signo de enfermedad de los huesos, de la tiroides, enfermedad de los riñones u otros problemas médicos, indica la Biblioteca de Medicina de los Estados Unidos.

Por eso, cuando el cuerpo no ingiere la cantidad suficiente del mismo se pueden presentar síntomas que afectan a distintas partes y estructuras de nuestro cuerpo.

Ante una ingesta insuficiente de calcio pueden empezar a presentarse algunas señales dentro de las cuales destacan: calambres musculares, insomnio, problemas dentales como las caries, caída abundante del cabello, uñas quebradizas y debilidad ósea, lo que puede conducir a que se presenten fracturas.

De igual forma, se puede presentar hormigueo en la lengua, los labios, los dedos o los pies, espasmos musculares y latidos irregulares del corazón. Precisamente este es uno de los órganos que puede afectarse por la deficiencia de calcio.

Según un estudio publicado este año en la revista Heart, hacer deporte de forma regular, limitar o eliminar la carne roja, dejar de fumar o tener cuidado con las grasas saturadas y el colesterol es importante para prevenir enfermedades del corazón; sin embargo, no incluir suficiente calcio en la alimentación también puede acarrear un peligroso efecto secundario para la salud cardiovascular.

Según un artículo publicado en el portal Business Insider, el estudio apunta a que las mujeres entre 50 y 80 años que padecen osteoporosis tienen un riesgo 79 % mayor de desarrollar una enfermedad cardíaca.

Algunos signos de la osteoporosis, como el adelgazamiento de la columna inferior, el cuello femoral y la cadera son especialmente predictivos de un mayor riesgo de ataque cardíaco y accidente cerebrovascular.

Para los expertos es importante que el cuerpo tenga unos niveles adecuados de calcio. La leche y sus derivados son la principal fuente de calcio de la dieta diaria. Independientemente del sexo o la edad, este mineral es vital para la salud por lo que ingerir los productos que lo contengan, así como aquellos que ayudan a fijarlos es determinante para un buen funcionamiento del cuerpo.

Muchas personas con niveles altos o bajos de calcio no tienen síntomas, precisa la Biblioteca de Medicina de los Estados Unidos, por ello es importante realizar exámenes para validar su cantidad de calcio cuando hay enfermedades preexistentes de riñones, tiroides, desnutrición y ciertos tipos de cáncer.

¿Cómo obtener este mineral?

Consumir alimentos ricos en calcio es la primera opción que deben tomar las personas para mejorar los niveles de este mineral en su organismo.

En el listado de estas comidas están los lácteos y sus derivados, sardinas, almendras, garbanzos, nueces, acelgas, espinacas, brócoli y frutos secos, entre otros. Adicionalmente, el cuerpo necesita vitamina D para absorber este mineral. Sin suficiente vitamina D, las personas no pueden producir cantidades suficientes de la hormona calcitriol (conocida como la “vitamina D activa”), que es precisamente la encargada de que el cuerpo absorba el calcio de los alimentos.

Osteoporosis
La osteoporosis se produce por debilidad en los huesos. | Foto: Universal Images Group via Getty

Cuando esta hormona no se activa el cuerpo se ve obligado a movilizar las reservas de calcio depositado en el esqueleto, lo que debilita el hueso existente e impide la formación y el fortalecimiento de hueso nuevo y fuerte.

Esta vitamina D se puede obtener de tres formas: cuando la piel se expone a la luz solar, al ingerir ciertos alimentos y por medio de suplementos. La vitamina D se produce naturalmente en el cuerpo después de la exposición a la luz del sol, según el Institute of Medicine de Estados Unidos.

Los alimentos que contienen vitamina D son, entre otros, El aceite de hígado de bacalao, el pescado azul, hígado, lácteos, huevos, aguacates y setas.

También se pueden consumir suplementos de calcio; sin embargo, estos no son para todas las personas, por esto la recomendación de los expertos es que cuando un individuo presenta deficiencia de calcio y no logra subir sus niveles con la dieta indicada, lo mejor es recurrir al médico con el fin de evaluar su condición exacta y validar el tratamiento a seguir.