Los trapos de cocina son los utensilios que más se una en la cocina, por ende, también es uno de los objetos que más fácil y rápidamente se ensucian. Y es que estos trapos se utilizan para secar manos, limpiar superficies, recoger restos de comida y hasta absorber líquidos, esto provoca que estos utensilios estén en constante contacto con bacterias y gérmenes.
Por lo tanto, si no se lavan de manera correcta ni se cambian con frecuencia, los trapos de cocina se convierten en un foco de contaminación.
El portal El Mueble, especialistas en cuidado del hogar, consultaron con la experta en limpieza Pía Nieto, quien contó que es fundamental establecer una rutina de limpieza para los trapos de la cocina que asegure su limpieza profunda y prolongue su vida útil, esto también permitirá mantener una higiene adecuada en el hogar.
Según esta experta, no basta con enjuagarlo, sino que es necesario seguir varios consejos de lavado, dependiendo el tipo de tela y cambiarlos a diario para evitar malos olores.
Nieto le mencionó a este portal la manera correcta de lavar los trapos de cocina de microfibra y de algodón.
Cómo lavar los trapos de cocina de microfibra
Los trapos de microfibra son muy prácticos para la cocina, ya que absorben la humedad y retienen la suciedad. Para mantenerlos en óptimas condiciones y proteger la higiene de la cocina, Nieto explica que lo ideal es cambiarlos una vez a la semana. Otro consejo de la especialista en limpieza es lavar los trapos sucios a una temperatura de 40° C. En el caso de la microfibra usada para limpiar, puede lavarse a 30° C.
Pía Nieto recordó que, durante el proceso de lavado, los trapos de microfibra no deben mezclarse con suavizantes, ya que se pueden dañar sus fibras y reducir su capacidad de absorción. Luego de lavarlos toca colgarlo y dejar que se sequen por completo antes de guardarlos en un cajón, esto evitará la aparición de humedad o moho.
Así puede lavar los trapos de cocina de algodón
Por último, la experta comentó que los trapos de cocina de algodón, al usarse para el secado de manos, platos o cubiertos, necesitan de un cuidado específico. Según Nieto, lo ideal es cambiarlos cada día y aprovechar cualquier lavado de ropa blanca para incluir en ese ciclo de lavado.