El presidente de la República, Iván Duque, tomó drásticas medidas luego de la muerte de dos soldados por un ataque terrorista que protagonizó la guerrilla del ELN, en hechos que se registraron en Tibú, departamento de Norte de Santander.

En ese sentido, el mandatario colombiano ordenó a las Fuerzas Militares aumentar las operaciones que permitan dar con el paradero de los responsables de la muerte de los soldados Fernando Aragonez y Carlos Javier Toquica.

Por medio de su cuenta de Twitter, el jefe de Estado manifestó que se trató de un ataque “cobarde” por parte de la guerrilla del ELN; en ese mensaje también envió un saludo de solidaridad que trasladó a los familiares de los uniformados.

“Intensificamos operaciones para dar con los responsables del cobarde ataque del ELN, en Tibú, Norte de Santander, que acabó con la vida de los Soldados Profesionales Fernando Aragonez y Carlos Javier Toquica. Toda mi solidaridad con los familiares de estos #HéroesPorSiempre”, trinó Duque.

Un nuevo atentado se presentó en contra las Fuerzas Militares en zona rural del municipio de Tibú, en el departamento de Norte de Santander. En la zona, un grupo de soldados fue atacado por francotiradores, dejando un saldo de dos militares muertos.

La emboscada se registró en la región de la vereda La Florida, cuando Tropas del Grupo de Caballería Mecanizado N.º 5 se encontraban desarrollando operaciones de control militar, según informó el Comando de la Trigésima Brigada, unidad militar orgánica de la Segunda División.

“Este ataque habría sido realizado por integrantes del grupo armado organizado ELN, de forma cruel e indiscriminada con arma de fuego”, dijo la institución.

Fernando Aragonez Nomelin y Carlos Javier Toquica Garzón, oriundos de Caquetá y Meta, pese a recibir los primeros auxilios de manera inmediata por parte de los enfermeros de combate, murieron en dicha zona por la gravedad de las lesiones.

Entretanto, el Ejército dio a conocer que tanto en el área rural como urbana de Tibú se adelantan operaciones militares, con el fin de dar con el paradero de los responsables de este crimen que “vulnera los derechos humanos e infringe las disposiciones del derecho internacional humanitario”.

Tras los hechos, la Trigésima Brigada envió un mensaje de condolencias a los familiares y personas cercanas a los soldados Fernando y Carlos, quienes llevaba un año prestando el servicio como profesionales: “Nos solidarizamos con su dolor y no se escatimarán esfuerzos para dar con estos terroristas que integran las estructuras que tanto daño le hacen a la población nortesantandereana”.

Sumado a ello, en lo recorrido de este año, se han registrado varios ataques a la fuerza pública, perpetrados por grupos criminales que delinquen en el departamento de Norte de Santander.

El viernes 3 de junio, un grupo de militares que se encontraba desarrollando reconocimiento de área en la vereda Caño Trece del municipio de Tibú halló un paquete sospechoso. De inmediato, realizó tareas de verificación con el Equipo Contra Artefactos Explosivos (Ecaex), junto a un canino antiexplosivos.

Mientras se ejecutaba la inspección, el artefacto fue activado, dejando como consecuencias heridas en un suboficial y dos soldados profesionales, quienes luego de prestarles los primeros auxilios fueron evacuados vía aérea hacia la ciudad de Cúcuta donde permanecen bajo observación médica y se encuentran estables.