Un grupo de colombianos logró convertirse en los cabecillas de una red internacional de estafadores, disfrazados de funcionarios y entidades del Gobierno de Estados Unidos. El objetivo era mostrarle al mundo que eran el enlace, el canal gubernamental para trabajar en ese país, a cambio del pago de unos sencillos trámites.
Una investigación de la Dijín reveló cómo la red logró engañar a miles de personas en cinco países y recaudar, por concepto de trámites, más de dos millones de dólares, recursos de las víctimas que confiaron en los servicios consulares de los supuestos funcionarios del Gobierno norteamericano. “Vamos a salir de esta”, les decían a los cabecillas una vez fueron capturados por la Policía.
“Las investigaciones dejaron al descubierto que estas personas contactaban víctimas a través de redes sociales, llamadas telefónicas y comunicaciones electrónicas, utilizando ‘asesores’ que guiaban falsos procesos de solicitud de visas”, señaló el coronel Juan Carlos Sierra Pineda, subdirector de la Dijín.
Los estafadores y falsos funcionarios de Estados Unidos incluso suplantaron agencias mediante el acondicionamiento de instalaciones físicas con banderas, logos, uniformes, emblemas y sellos oficiales falsificados. También administraban al menos 150 sitios web fraudulentos y 30 páginas de Facebook que simulaban ser portales oficiales del Gobierno estadounidense.
“La Policía Nacional de Colombia, junto con la Fiscalía General de la Nación, coordinada con la Agencia de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI), la oficina de USAID OIG de Estados Unidos y el apoyo de autoridades de El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Ecuador, logró la desarticulación de una sofisticada organización criminal transnacional responsable de defraudar a miles de ciudadanos”, señaló el oficial.
La operación se adelantó de manera simultánea en cinco países y dejó la captura de tres personas en Colombia y con fines de extradición, seis en El Salvador, ocho en Ecuador y dos en Estados Unidos. También se realizaron cinco allanamientos y la incautación de formatos y documentos de aplicación a visas H-2B, dispositivos electrónicos, sellos de aprobación y negación de visas, y otros elementos probatorios.
“La investigación inició en El Salvador, donde se detectaron denuncias recurrentes de víctimas sobre trámites falsos para obtener visas estadounidenses. Posteriormente, se identificó que el mismo patrón delinquía en Guatemala, Honduras, Nicaragua y Ecuador. Las solicitudes de asistencia judicial permitieron ubicar los principales enlaces en Medellín y ejecutar los allanamientos clave del caso”, dijo la Dijín.
Señalan las autoridades, entre ellas la Agencia de Seguridad Nacional HSI, la oficina de USAID OIG de los Estados Unidos y la Dirección Especializada Contra el Lavado de Activos, que el operativo se consolida como uno de los golpes más contundentes contra redes de fraude migratorio en la región.