Con el propósito de articular acciones para atender la situación de inestabilidad que generaron los deslizamientos en el Km 88 de la Vía al Mar Cartagena-Barranquilla, las autoridades municipales junto a Ruta Costera trabajan articuladamente en la búsqueda de soluciones y medidas alternativas para mitigar la situación de riesgo.
En ese sentido desde del concesionario indicaron que se activó el comité de gestión del riesgo de Tubará, tras una reunión se llevó a cabo el pasado viernes 28 de octubre, liderada por la Alcaldía de Tubará, la oficina de gestión del riesgo y la personería municipal, con la participación de Ruta Costera, la interventoría en representación de la ANI, Tránsito del Atlántico y líderes de la comunidad.
Por su parte la oficina de gestión del riesgo de Tubará con el liderazgo del alcalde municipal Jose Coll Cervantes, activó el plan de contingencia para iniciar con la reubicación temporal de las familias aledañas a la zona afectada.
“Luego de la reunión, los funcionarios se trasladaron al Km88 para realizar inspección y censo de las familias que deben ser reubicadas temporalmente mientras se atiende la situación”, anotaron las autoridades.
En cuanto a la Vía al Mar, continúa habilitado un contraflujo entre el Km 87+300 y el Km 88+600, lo que permite el paso en ambos sentidos.
En los extremos del contraflujo se cuenta con señalización preventiva, informativa y reglamentaria, así como a lo largo de todo el tramo mencionado. “Como parte de la señalización se cuenta con paneles móviles de mensajería variable, señales de límite de velocidad a 30 k/h y delimitación de los carriles con delineadores tubulares, lo que ha permitido canalizar el tráfico y seguir garantizando tanto la seguridad de los usuarios, como la conexión entre Cartagena y Barranquilla”, dijeron desde Rita Costera, en el escrito.
Así mismo aseveraron que continúa recomendando a los usuarios estar atentos a la señalización dispuesta en la zona, programar sus viajes con anticipación para evitar atrasos y atender las recomendaciones de las autoridades de tránsito.
El deslizamiento de tierra y el colapso de la vía se presentó, exactamente en el corregimiento de El Morro, en jurisdicción del municipio de Tubará, donde la comunidad ya había alertado el deterioro de la vía.