Un inconveniente frecuente es quedarse sin batería en el celular, esta situación puede volverse aún más complicada cuando se va la luz en la casa.
En esos momentos, la persona puede quedar incomunicada y sin manera de resolver el problema hasta que regrese la energía eléctrica.
Aunque la opción más común y confiable es contar con una batería externa, que permite recargar el celular de forma portátil cuando tiene suficiente carga almacenada, también existen dos alternativas adicionales que pueden funcionar en caso de emergencia.
Opciones más allá de la batería externa
La recomendación más común suele ser contar con una batería portátil, que permite recargar el celular sin depender de un enchufe.
Sin embargo, no siempre se tiene a mano o puede ocurrir que también se encuentre descargado y, en caso de darse ese escenario, existen dos alternativas que pueden resolver el problema de forma inmediata.
Una de ellas es el carro, pues la mayoría de vehículos modernos incluye puertos USB que admiten la conexión directa del cable de carga del celular.
Tenga en cuenta que incluso vehículos antiguos permiten cargar el celular a través de adaptadores para el encendedor; en ambos casos, el sistema del auto entrega la energía suficiente para darle una recarga útil al dispositivo.
También es posible usar un convertidor que permita conectar el cargador del celular dentro del auto, lo que ofrece una carga más estable y rápida.
El portátil como “rescatista” inesperado
Otra herramienta útil es un computador portátil. Aunque su puerto principal está pensado para transferir archivos, también puede suministrar energía al celular. Conectarlo al portátil puede ofrecer una recarga hasta del 50 %.
Eso sí, la batería del computador portátil es fundamental, pues toca tener en cuenta la carga que tenga y también que se reducirá con mayor rapidez, pero cuando lo urgente es tener el celular operativo, esta alternativa puede marcar una gran diferencia.
En momentos de emergencia, estas soluciones pueden convertirse en aliadas clave para no quedar completamente desconectado.