El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado sus planes para hacer retroceder los requisitos de eficiencia de combustible para autos y camiones ligeros, calificando las normas existentes de “antieconomía”.
La medida, destinada a reducir los costes para los consumidores estadounidenses, ha sido presentada junto a ejecutivos de los principales fabricantes de automóviles, entre ellos el consejero delegado de Stellantis, Antonio Filosa, y el jefe de Ford, Jim Farley, que han asegurado que podrían ayudar a ofrecer vehículos más asequibles al mercado estadounidense.
Según la normativa actual, establecida durante la Administración Biden, el consumo medio de combustible de una flota de vehículos modelo 2031 debe alcanzar unas 50 millas por galón, unos 4,7 litros cada 100 kilómetros.
Ahora, la nueva propuesta rebajaría ese objetivo a 34,5 millas por galón, unos 6,8 litros cada 100 kilómetros, según informa la agencia de noticias alemana DPA.
Las normas más estrictas de Biden pretendían reducir los costes de combustible para los consumidores al tiempo que fomentaban la protección del medio ambiente, aunque los fabricantes de automóviles se enfrentaban a mayores costes de cumplimiento.
La administración de Trump también planea poner fin al comercio de créditos de emisiones a partir del modelo del año 2028. Los fabricantes de automóviles habían utilizado anteriormente estos créditos para cumplir las estrictas normas, con Tesla en particular beneficiándose financieramente del sistema.
Beneficios para los constructores de carros
Las compañías europeas del sector del automóvil han rebotado con fuerza este jueves, hasta más de un 6 %, después de conocerse los planes del presidente Trump.
En este contexto, las acciones de Volvo Cars en la Bolsa de Estocolmo escalaron casi un 5 %, mientras que las compañías que cotizan en la Bolsa francesa, como Renault o Stellantis, subieron un 6,35 % y un 3,75 %, respectivamente.
En el caso de las compañías alemanas, estas tuvieron un comportamiento muy positivo en la Bolsa de Frankfurt, con subidas desde casi el 3 % de Volkswagen, hasta el 6,13 % de Porsche, pasando por un incremento del 4,83% de Mercedes-Benz o del 4,49% para BMW.
Fuerte movida de Stellantis en EE.UU.
El fabricante de autos Stellantis, que produce una decena de marcas como Jeep, Chrysler, Citroen, Alfa Romeo y Peugeot, anunció hace un par de meses que planea invertir 13.000 millones de dólares en los próximos cuatros años en Estados Unidos.
Según un comunicado, Stellantis debe lanzar cinco nuevos vehículos y emprender “diecinueve acciones” a nivel de sus productos para 2029, para sumar de este modo más de 5.000 empleos en fábricas de Illinois, Ohio, Míchigan e Indiana.
El grupo precisó que se trata de su mayor inversión única en 100 años de historia.
Stellantis planea, entre otras cosas, reactivar la fábrica de Belvidere (Illinois) que había sido un importante punto de fricción durante las negociaciones del acuerdo social entre los tres grandes fabricantes de automóviles, también Ford y General Motors, en 2023.
Se había alcanzado un acuerdo entre las direcciones y el sindicato, luego validado por los miembros, tras una “huelga histórica” de más de seis semanas.
“Acelerar el crecimiento en Estados Unidos ha sido mi principal prioridad desde mi primer día. El éxito en Estados Unidos no es simplemente positivo para Stellantis en Estados Unidos, nos hace más fuertes en todas partes”, comentó en el comunicado Antonio Filosa, quien asumió la dirección del grupo en junio, seis meses después del despido de Carlos Tavares.
El paquete de 13.000 millones de dólares incluye gastos de investigación y desarrollo, costos de suministro así como financiamientos destinados a las herramientas de producción.
Esto debería permitir un crecimiento de su producción en un 50 % en comparación con el nivel actual.