Confidenciales

Daniel Samper Pizano indignado con decisiones de la justicia contrarias a sus intereses

El periodista critica la decisión de la Fiscalía frente al caso Uribe Vélez, parece olvidar la posición que adoptó cuando su hermano, el expresidente Ernesto Samper, fue investigado por el proceso 8 mil.

4 de abril de 2021

Al periodista Daniel Samper Pizano solo le gustan las decisiones de la fiscalía que favorecen sus intereses. En su columna de hoy le pide la renuncia al fiscal Francisco Barbosa por las decisiones del ente acusador frente a casos como el del expresidente Álvaro Uribe y del candidato presidencial Sergio Fajardo. Lo mismo hizo en 1996 cuando su hermano el expresidente Ernesto Samper enfrentaba las investigaciones por la infiltración de dineros del Cartel Cali en su campaña presidencial.

El periodista guardó silencio por dos años del proceso y luego se destapó en una entrevista en la Revista SEMANA, retomada por El Tiempo, en la que se fue lanza en ristre contra los periodistas críticos del Gobierno de su hermano, contra la fiscalía y hasta contra EE.UU., que en ese momento le quitó la visa al presidente. “La Fiscalía, desconociendo la norma constitucional que la obliga a investigar, tanto lo favorable como lo desfavorable al acusado, se dedica tan solo a acopiar cargos en contra y omite los hechos a favor”, dijo Samper Pizano en SEMANA.

Además, aseguró que siempre tuvo una profunda capacidad de indignarse frente a la justicia: “Llevo dos años sumergido en la indignación, la ira, la frustración y la depresión”. Claramente no le gustó la actuación de la Fiscalía que, decidida, investigó el proceso 8 mil, tras la elección de su hermano como presidente, con dineros del narcotráfico.

Pero el periodista Samper Pizano no paro ahí, sobre EE.UU. expresó entonces que su “lista de intromisiones, despojos y maltratos es larga, desoladora y conocida. En este sentido el embajador no es más que un empleado de poca categoría con aires virreinales que intenta ayudarle a su jefe a ganar las elecciones”. En ese momento, el presidente estadounidense era el demócrata Bill Clinton, quien adoptó una posición severa frente a la infiltración del dinero narco en las más altas esferas de la política colombiana. Mientras tanto, el embajador era Myles Robert Frechette, un diplomático de carrera estadounidense que se incorporó al Departamento de Estado en 1963.

Con sus colegas, críticos vehementes del gobierno Samper, Daniel Samper Pizano fue inclemente, y también lo fue con el papel de los medios frente al escándalo de la narcoelección: “Creo que la prensa es parte de la crisis y que ha retrocedido hasta los viejos tiempos del periodismo político que mi generación luchó por erradicar. Da la sensación de que a muchos medios de comunicación lo que les interesa no es la verdad real de lo acontecido, sino poder armar una opción verosímil que, aunque errada, armonice con sus intereses...”.

Mientras tanto, frente al caso del Hacker que impulsó la fiscalía de Eduardo Montealegre en plena campaña presidencial de 2014, Daniel Samper Pizano no se indignó.

Con todo esto el periodista Samper Pizano demuestra que cuando opina se deja llevar por sus emociones e intereses. Aunque está en su derecho, es bueno tenerlo en cuenta.