Hoy tenemos la mayor cantidad de viviendas gratuitas de la historia: 275.000 entre urbanas y rurales. | Foto: Cortesía Ministerio de Vivienda

COLUMNA

“Hemos logrado mucho, pero el próximo Gobierno debe mejorarlo”

El ministro de Vivienda, Camilo Sánchez Ortega, hace un balance de los logros en el sector durante la presidencia de Juan Manuel Santos, y le hace un par de sugerencias a su sucesor.

Camilo Sánchez Ortega*
30 de julio de 2018

En este Gobierno hemos conseguido resultados históricos en casi todos los frentes, muy especialmente en la vivienda, cerrando brechas que parecían imposibles.

Las casas gratis deben mantenerse como uno de los pilares para superar la pobreza. Hay familias sin recursos que la única opción que tienen para acceder a un techo digno es esta. Lo que debemos lograr es que el sentido de pertenencia de los beneficiarios sea más fuerte, por eso los hogares deberían aportar horas de trabajo para pintar, pulir paredes o mejorar el entorno.

Es trascendental continuar el actual esquema de otorgar subsidios. La vivienda gratuita, Mi Casa Ya y los subsidios a la tasa crearon sinergias entre los constructores, el sector financiero y el Gobierno. Por esta razón diseñamos una política de choque con la que este año logramos asegurar 1,2 billones de pesos para subsidios de tasa de interés. Así 57.670 subsidios se destinaron a viviendas de interés social y prioritario, y otros 20.000 para no VIS.

En el futuro este tipo de instrumentos deben trascender los periodos de gobierno, para que los constructores desarrollen proyectos sin temor a que el mandatario de turno cambie la política.

Es esencial seguir creando tejido social en las urbanizaciones, robusteciendo las estrategias de acompañamiento, que deben ser más extendidas por el país, garantizando su sostenibilidad en estos espacios.

Se deben seguir promoviendo ciudades dentro de las ciudades. Este Gobierno invirtió casi 1 billón de pesos para lograr que las VIP cuenten en su entorno con CAI, centros de salud, CDI, colegios, parques y demás facilidades.

Sugiero fortalecer y agilizar el proceso para las revocatorias. Los beneficiarios de nuestros subsidios deben saber que si no le dan un buen uso a la vivienda, la perderán y se les entregará a familias que sí la necesiten.

Mi última recomendación es que toda la política de vivienda urbana, rural y la destinada a atender emergencias, se concentre en el Ministerio de Vivienda. Lo que hemos logrado era casi una utopía, pero hoy tenemos la mayor cantidad de viviendas gratuitas de la historia: 275.000 entre urbanas y rurales, más de 1.750.000 viviendas iniciadas en el país en los últimos ocho años y se disminuyó el déficit habitacional cuantitativo al 5,2 por ciento en 2017, con lo que seguramente bajaremos al 5 por ciento en 2018, y así ubicarnos por debajo de la meta del Plan Nacional de Desarrollo (que es el 5,5).

Como dice el presidente Santos, hemos logrado mucho, pero el próximo gobierno lo debe hacer mejor para seguir construyendo paz a través de este ministerio que cambia vidas.

*Ministro de Vivienda, Ciudad y Territorio.