El personal de protección civil espera junto a maniquíes en camas de hospital dentro de un tren adaptado para curar pacientes, inaugurado en la estación central de Roma Termini, el lunes 8 de marzo de 2021. El tren de la salud permite trasladar y tratar a los pacientes en ocho vagones equipados con equipos específicos, entre ellos lugares de cuidados intensivos. (Foto AP / Alessandra Tarantino).
Una unidad de UCI en Italia. | Foto: AP

Vida Moderna

La covid-19 ha agravado el trastorno de estrés postraumático en pacientes ingresados a UCI

Según un estudio publicado en febrero de 2021, el 30 % de los sobrevivientes de la covid-19 experimentaron trastorno de estrés postraumático.

2 de abril de 2021

El estrés postraumático es un trastorno que algunas personas presentan luego de haber vivido una situación impactante, terrorífica o peligrosa. Habitualmente los problemas empiezan a evidenciarse en los siguientes tres meses después del evento. Según expertos, la pandemia de la covid-19 ha agravado las secuelas del síndrome.

La hospitalización que muchos han vivido a causa de la enfermedad ha hecho que la mayoría presente trauma emocional y psicológico. Según CNN, un estudio publicado en febrero de 2021 por la Revista de la Asociación Médica Estadounidense de Psiquiatría mostró que el 30 % de los sobrevivientes de la covid-19 experimentaron trastorno de estrés postraumático. Cabe resaltar que desde el inicio de la pandemia, expertos advirtieron que el mundo debía prepararse para una crisis de la salud mental.

El trastorno de salud mental consiste en que la persona afectada experimenta pensamientos, recuerdos o pesadillas que hacen que vuelva al momento traumático. El trastorno hace que las personas sufran ataques de pánico y experimenten problemas para dormir.

El estudio concluye que de 381 pacientes tratados en un hospital en Roma, Italia, entre abril y octubre de 2020, todos fueron remitidos a un centro de atención psiquiátrica. Según dijo la Dra Delfina Janiri, quien ayudó en el estudio, los pacientes presentaron ansiedad, depresión, trastornos del estado de ánimo y estrés postraumático.

El estudio subrayó que alrededor del 70 % de las personas que presentaron síntomas prolongados de la enfermedad por coronavirus, como fatiga, dolor de cabeza, entre otras, presentaron que tenían trastorno de estrés postraumático a diferencia del 31 % de personas que se recuperaron con mayor facilidad.

COVID MUNDO
Pacientes contagiados con COVID-19 aguardan el domingo 21 de marzo de 2021 en un hospital de campaña erigido en el estacionamiento del auditorio Poliedro de Caracas, Venezuela. (AP Foto/Ariana Cubillos) | Foto: AP

Según el Dr Ronald Brenner, psiquiatra y presidente de salud conductual de Catholic Health, es común que el trastorno se presente en personas que tuvieron una estancia prolongada en una UCI, pero las secuelas están apareciendo en personas que vivieron una enfermedad moderada en su casa. Aunque no se sabe el porqué, el psiquiatra mencionó que esto podría deberse a la alta tasa de mortalidad.

Brenner contó para el medio, que uno de sus pacientes fue hospitalizado durante cinco días, sin necesidad de UCI, pero que cualquier tos o dolor desencadena ansiedad y a veces ataques de pánico en el sujeto.

“Comenzó a tener verdaderos ataques de ansiedad por tener covid nuevamente, porque los síntomas no desaparecían, por tener covid residual para siempre”, dijo Brenner. “Luego también tuvo grandes dificultades para volver al trabajo debido al problema de la evasión”.

Por lo que se sabe, el trastorno hace que las personas eviten situaciones asociadas con el trauma o los orígenes del problema. Por otro lado, uno de los problemas que detectaron es el miedo al estigma y al ser etiquetados. Según el Brenner, es importante que los afectados sean contactados por parte del personal médico antes de que sea un problema con cifras altas.

Según Brenner, para ellos es “mucho más difícil aceptar que hay un componente psicológico en esto y no solo un componente físico”.

Por otro lado, Mònica Magret, médica intensiva del Hospital Joan XXIII de Tarragona, asegura que entre más días esté un paciente grave en una unidad de cuidados intensivos, y entre más tiempo tenga que llevar ventilación y sedación este ”tendrá más posibilidades de sufrir estas secuelas psiquiátricas”.