Aumento del salario mínimo para 2024, en manos de la inflación de noviembre | Esto dijo la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez

El incremento del salario mínimo que aplicará en 2024 todavía es un misterio, pero las apuestas son muchas. Que subirá en dos dígitos, afirman algunos, mientras otros creen que, simplemente, el ajuste sería cercano al 10 %.

La inflación es uno de los componentes determinantes para la subida del salario mínimo, que en Colombia, cobija a buena parte de la población ocupada y a la gran mayoría de pensionados.

Pero como la inflación total del año 2023, que es la que debe entrar entre las variables que se toman en cuenta para subir el salario mínimo, solo se conocerá hasta el año entrante, la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, señaló que estarán trabajando la negociación con la estadística de inflación que se de a conocer el 30 de noviembre.

Arranca el estudio para el alza

El decir de la ministra es que en esta oportunidad empezarán temprano. Es más, “empezaremos antes para ir haciendo con la mesa de concertación los estudios preliminares, que nos permitan tener unas reflexiones mucho más profundas. Allí tendremos la posibilidad de escuchar la propuesta de los empresarios, sus análisis, lo mismo la de los trabajadores, llevaremos la academia y desde luego el Gobierno también hará sus análisis y desde allí esperamos concertar el incremento del salario mínimo”, dijo la funcionaria.

El poder adquisitivo

El incremento en el salario mínimo se hace para que el trabajador no pierda poder adquisitivo, teniendo en cuenta que la inflación sube y se lleva los aumentos salariales anteriores.

Inclusive, en estos últimos dos años, con la escalada alcista de los precios, ya los trabajadores experimentan dificultades para hacer rendir el ingreso laboral. La incertidumbre está en el ambiente, pues la expectativa para el crecimiento de la economía en este y el próximo año es de una cifra baja. Dicho crecimiento es el que permite que los inversionistas se animen a ampliar las fábricas y generar así mayor oportunidad laboral.

Según Ramírez, varias de las medidas adoptadas en la negociación del salario mínimo que está vigente en este año permitieron mantener el poder adquisitivo de los trabajadores, pese a la escalada de la inflación. “El incremento real ha sido de más del 4 %, mientras que para el año 2022 esta cifra fue negativa y afectó el bolsillo de los colombianos”, argumentó.

Entre las medidas mencionadas destacó la desindexación del salario mínimo de ciertos gastos, de manera que no se comieran el incremento.

El nubarrón que hay en el camino hacia un incremento del salario mínimo que permita a los colombianos adquirir su canasta básica, es que la inflación, que ha venido bajando, se pueda volver a incrementar.

No hay que olvidar que en 2022, debido a una inflación superior al 13 %, el salario mínimo tuvo que ser incrementado en un 16 %, una alza histórica que, para algunos analistas, en los inicios del año ayuda a hacer presión para que suban más los precios.

De esa manera, empieza uno de los debates más complejos y sensibles que se dan en Colombia en todos los fines de año.