Banco de la República mantiene las tasas de interés en 1,75 %: ¿qué significa esto?

Por segundo mes consecutivo, el Banco de la República dejó quietas las tasas de interés que aplican para Colombia en 1,75 %, en una decisión unánime de la junta directiva.

Según el banco central, la decisión se tomó teniendo en cuenta aspectos como que las expectativas de inflación están ancladas alrededor del 3 %. Además, esperan que se mantenga la recuperación de la economía en el 2021, en contraste con el mercado laboral, que sigue estando fuertemente afectado.

Para este año, los técnicos del Emisor prevén que el producto interno bruto (PIB) del país caiga 7,6 % al cierre de este año. En contraste, en el 2021 habría un fuerte rebote de la actividad productiva del orden de 4,6 %.

La decisión de este viernes se da nueve meses después de que la junta del Emisor comenzará la reducción del costo del dinero desde 4,75 % a 1,75 %, como respuesta al duro choque económico que trajo el coronavirus y las medidas de confinamiento para frenar su propagación.

Este bajonazo terminó en octubre pasado, cuando el banco central comenzó a ver la recuperación de la economía, una vez se terminaron las cuarentenas sectorizadas en diferentes ciudades del país.

“Colombia ha sido el país que más ha bajado las tasa en la región (...). En principio, nuestra tasa de interés es un instrumento por excelencia para hacerle frente a esta situación”, explicó el gerente del Banco, Juan José Echavarría, quien, a propósito, no dio pistas sobre la elección de su reemplazo.

Con el sostenimiento de los tipos de interés, el Emisor le manda una señal al mercado de que estas se mantendrán en dicha cifra durante un buen tiempo, por lo menos mientras la economía sale de la recesión y vuelve a la senda de recuperación.

Así las cosas, los bancos comerciales reciben también un mensaje para seguir bajando sus tasas de interés al público. Analistas calculan que las reducciones que hace el Banrepública se reflejan en los ciudadanos unos seis meses después, con lo cual estas ya se están viendo en algunas entidades financieras y se seguirán reduciendo de aquí al próximo año.

Inflación y salario mínimo

De otro lado, el gerente del Emisor espera que el aumento del salario mínimo se mantenga atada a la fórmula de inflación más productividad laboral.

En su concepto, si se llega a estar en línea con esta suma “no se causaría más presiones inflacionarias, ni se causaría desempleo”.

Por lo pronto, la entidad tendrá la tarea de presentar ante la Comisión de Concertación Laboral las cifras de inflación esperada para el próximo año. Según lo dicho este viernes por Echavarría, las expectativas apuntan a que este dato estará cercano al 3 %, con un mínimo de 2 % y un máximo de 4 %.

Este dato será fundamental de cara a las reuniones para fijar el aumento del mínimo, que comienzan este lunes con la subcomisión de productividad. En dicha sesión, el director del Dane, Juan Daniel Oviedo, presentará las cifras de productividad laboral de este año, que se prevé se mantenga en terreno negativo.

Posteriormente, los días 2 y 3 de diciembre habrá presentaciones de los ministerios de Trabajo y Hacienda, así como del Dane y el Banco de la República. Para el 7 de ese mismo mes, centros de estudios y expertos expondrán sus visiones sobre el mercado laboral, mientras que el 10 de diciembre comenzarán en forma las negociaciones.

La puja entre patronos y trabajadores irán, inicialmente, hasta el 18 de diciembre. Si para ese entonces no hay humo blanco, la mesa tripartita podrá convocar a reuniones extraordinarias.

Eso sí, estas discusiones tendrán como límite el 30 de diciembre de este año, día en el cual -con o sin acuerdo debe salir el decreto del Gobierno con el reajuste salarial.