Entrevista
“Debemos tener más miedo a un diagnóstico de cáncer tardío que a un riesgo teórico de radiación”: radióloga Yuly Paola Narváez
Con el respaldo de nuevas tecnologías como la tomosíntesis y la mamografía con contraste, la radióloga Yuly Paola Narváez Rojas explica cómo la especialidad ha revolucionado la manera de identificar lesiones antes de que sean perceptibles y por qué la imagen médica se ha convertido en el eje central de la detección temprana del cáncer de mama.
Siga las noticias de SEMANA en Google Discover y manténgase informado
Cada avance en imagen diagnóstica representa una nueva oportunidad para anticiparse al cáncer. La radiología mamaria se ha convertido en un eje central en la medicina preventiva porque permite detectar lesiones milimétricas, invisibles al tacto o a la vista, y orientar decisiones clínicas que definen el pronóstico de una paciente. A través de técnicas cada vez más precisas, como la tomosíntesis o la mamografía con contraste, hoy es posible realizar diagnósticos más tempranos y personalizados, especialmente en mujeres con mamas densas, un grupo que requiere una atención diferencial y especializada.
En el marco de la campaña Entender el cáncer de mama salva vidas, liderada por las clínicas del Country y La Colina, y con el acompañamiento del Círculo de Mujeres de Semana Dinero, la médica radióloga Yuly Paola Narváez Rojas, especialista en diagnóstico e intervencionismo mamario, comparte cómo la radiología ha pasado de ser un método complementario a convertirse en el punto de partida de la detección temprana, la planeación quirúrgica y el acompañamiento integral de las pacientes.
CÍRCULO DE MUJERES: ¿Cuál es el papel de la radiología en la detección temprana del cáncer de mama?
Yuly Paola Narváez (Y. P. N.): La radiología es fundamental para detectar el cáncer de mama en sus etapas iniciales, cuando la lesión aún no puede sentirse ni verse a simple vista. La mamografía y otros estudios por imágenes permiten identificar esos cambios invisibles y así aumentar significativamente las posibilidades de supervivencia. Además de descubrir la lesión, la imagen ayuda a caracterizarla para determinar si es benigna o maligna, lo que es clave para que los especialistas puedan planificar el tratamiento adecuado. La radiología también acompaña a la paciente durante todo su proceso: guía biopsias, apoya la cirugía, evalúa la respuesta a los tratamientos y realiza controles posteriores para detectar posibles recurrencias. En resumen, la imagen diagnóstica no sólo detecta, sino que orienta y acompaña todo el camino del cáncer de mama, haciendo posible un manejo más preciso y oportuno.
CÍRCULO DE MUJERES: ¿Qué diferencia existe entre una mamografía de tamizaje y una diagnóstica?
Y. P. N.: La mamografía de tamizaje se realiza en mujeres sin síntomas, como medida de prevención, mientras que la diagnóstica está dirigida a quienes presentan molestias, bultos o secreciones. En Colombia, el tamizaje con mamografía inicia a partir de los 50 años, según las guías nacionales. Sin embargo, la edad de inicio sigue siendo motivo de debate debido al creciente número de casos de cáncer de mama en mujeres menores de 50 años. Por esta razón, se recomienda realizar tamizaje desde los 40 años o antes, especialmente en mujeres con factores de riesgo.
CÍRCULO DE MUJERES: Además de la mamografía, ¿qué otros estudios complementan el diagnóstico?
Y. P. N.: Entre los métodos complementarios están la ecografía, la resonancia magnética y la mamografía con contraste, que ha ganado fuerza en los últimos años. Son especialmente útiles en mujeres con mamas densas, una característica normal del tejido mamario, pero que aumenta el riesgo de cáncer. Muchas mujeres desconocen la densidad de sus mamas, y conocerla es clave para definir los métodos más adecuados de diagnóstico. La densidad mamaria no es una enfermedad, pero sí un factor de riesgo que requiere estudios complementarios, se requiere ir más allá con ecografía, resonancia magnética o mamografía con contraste.
CÍRCULO DE MUJERES: ¿Qué avances tecnológicos recientes han mejorado la precisión de los estudios de mama y cómo impactan en la reducción de diagnósticos tardíos?
Y. P. N.: Uno de los avances más significativos es la tomosíntesis, que es una tecnología que permite obtener imágenes tridimensionales de la mama, lo que mejora la detección especialmente en pacientes con mama densa, pero también en aquellas con mama grasa. También facilita la interpretación para los radiólogos y disminuye la necesidad de repetir exámenes cuando la mamografía digital no es concluyente. Por eso, se considera que el futuro del tamizaje está orientado hacia esta tecnología. En el diagnóstico mamario, existen métodos que se enfocan en la morfología de las lesiones, como la mamografía, la ecografía y la tomosíntesis, que permiten evaluar los márgenes y características estructurales. También están los métodos que evalúan la función, porque la mayoría de los cánceres requieren una irrigación sanguínea intensa para desarrollarse. Esta actividad se detecta con estudios funcionales como la resonancia magnética y la mamografía con contraste, que actualmente se usa cada vez más porque es una alternativa costo-efectiva y cómoda para la paciente. A diferencia de la resonancia magnética, que es un estudio más largo y puede ser incómodo, sobre todo para pacientes con claustrofobia o con dispositivos médicos implantados, la mamografía con contraste es un procedimiento más sencillo y accesible.
CÍRCULO DE MUJERES: Muchas mujeres sienten temor al realizarse una mamografía. ¿Qué mitos se deben desmentir?
Y. P. N.: El más común es el miedo a la radiación. Si bien la mamografía utiliza rayos X, es un procedimiento muy seguro. El riesgo de cáncer inducido por radiación es teórico y no está clínicamente demostrado. En más de cuatro décadas de tamizaje, no existen estudios que relacionen la mamografía con la aparición de cáncer, pero sí miles de vidas salvadas gracias a su uso. Lo repito siempre: debemos tener más miedo a un diagnóstico de cáncer tardío que a un riesgo teórico de radiación. Otro temor frecuente es el dolor o la incomodidad durante el examen. Sin embargo, ese breve malestar vale la pena, porque permite detectar el cáncer a tiempo.
CÍRCULO DE MUJERES: ¿Cómo se relacionan el autoexamen, la consulta médica y los estudios de imagen?
Y. P. N.: Todos son esenciales y se complementan. El autoexamen permite detectar cambios visibles o palpables; la consulta médica es la oportunidad para una valoración profesional, pero tanto el autoexamen como la exploración clínica tienen limitaciones. Hay lesiones que, por su ubicación o el tipo de tejido mamario, solo pueden verse con imágenes diagnósticas, que son las que realmente confirman o descartan la enfermedad.
CÍRCULO DE MUJERES: ¿Qué señales encienden las alertas en una mamografía?
Y. P. N.: En la evaluación radiológica, una de las primeras cosas que observamos es la simetría entre ambas mamas. La mama es un órgano par que en condiciones normales, debe mostrar una distribución homogénea y equilibrada del tejido. Cuando detectamos asimetrías en volumen, en la textura o en la densidad del tejido, es una señal de alerta que requiere un estudio más profundo con métodos complementarios y una valoración especializada. Otro hallazgo fundamental son las microcalcificaciones, que, aunque pequeñas, son importantes porque pueden ser el indicio más temprano de cáncer, en su forma conocida como carcinoma in situ. Estas microcalcificaciones solo pueden visualizarse mediante mamografía y no existen otras técnicas que las detecten con la misma precisión. Además, prestamos atención a nódulos, irregularidades en los márgenes, o cambios en la piel y el contorno de la mama. Estos signos, detectados a través de la mamografía, nos permiten identificar lesiones sospechosas que no son evidentes en un examen físico o en otras imágenes.
CÍRCULO DE MUJERES: ¿Cómo acompañan los radiólogos a las pacientes durante el tratamiento y los controles posteriores?
Y. P. N.: Desde el diagnóstico inicial guiamos las biopsias percutáneas, que hoy son el estándar, evitando cirugías innecesarias. También realizamos marcaciones con clips metálicos para orientar a los cirujanos y garantizar que la resección sea precisa, incluso si la quimioterapia elimina la lesión visible. Durante todo el proceso, acompañamos a las pacientes con estudios de seguimiento y control para asegurar una recuperación completa y detectar posibles recurrencias.
CÍRCULO DE MUJERES: ¿Cuál es su mensaje para las mujeres y hombres frente a la importancia del diagnóstico temprano?
Y. P. N.: Es fundamental que tanto mujeres como hombres comprendan cómo se diagnostica el cáncer de mama, conozcan los métodos disponibles y sus limitaciones, y se informen sobre factores clave como la densidad mamaria. En Colombia, entre el 40 y el 50 por ciento de las mujeres tienen mamas densas, una característica que aumenta entre cuatro y seis veces el riesgo de desarrollar cáncer. Por eso, la recomendación es clara: ante cualquier duda, cambio o síntoma, es vital consultar al médico y realizar controles periódicos para identificar el método diagnóstico más adecuado. El autocuidado y la información son herramientas poderosas que permiten tomar decisiones informadas sobre la salud y los tratamientos que puedan requerirse.