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El cáncer de mama: la urgencia de detectar a tiempo

Cada año, más de 2,2 millones de mujeres en el mundo reciben un diagnóstico de cáncer de mama, el de mayor incidencia global en ellas. En Colombia, esta patología también se ubica en el primer lugar, al representar el 27 por ciento de todos los cánceres femeninos. Detectarlo en etapas tempranas eleva la supervivencia.

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Juliana Rojas Hdz
6 de octubre de 2025, 11:00 a. m.
Victoria logró encontrar a un doctor particular que le realizó la cirugía
Diagnosticar el cáncer de mama en etapas tempranas ayuda a que la supervivencia, luego de 5 años, esté en promedio entre el 72 y el 91 por ciento | Foto: dpa/picture alliance via Getty I

La evidencia es clara: la detección temprana marca la diferencia entre la vida y la muerte cuando se presenta un diagnóstico de cáncer de seno, la tipología más frecuente entre las mujeres en el mundo y en Colombia.

Además de su incidencia, también es la principal causa de mortalidad por cáncer en mujeres, especialmente en países de ingresos medios y bajos, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Sin embargo, la tasa promedio de supervivencia luego de cinco años alcanza 91 por ciento. Cuando el tumor se identifica en etapa inicial, la probabilidad se eleva a casi 99 por ciento, particularmente en países de mayores ingresos, según datos de la Sociedad Americana de Cáncer (2024).

Gracias a los avances en tratamientos y la información a la población que ha impulsado un diagnóstico precoz, se han salvado miles de vidas en las últimas décadas. Entre 1989 y 2020, las muertes por cáncer de mama disminuyeron 44 por ciento, lo que equivale a más de 517.900 vidas preservadas gracias a la prevención y al acceso a terapias más efectivas, de acuerdo con datos publicados en el informe Breast Cancer Facts & Figures 2024, de la Sociedad Americana de Cáncer.

La OMS es contundente: el diagnóstico temprano amplía drásticamente la posibilidad de cura. Por eso, estrategias como el tamizaje mediante mamografía, la autoexploración informada y el acceso rápido a diagnóstico y tratamiento son determinantes.

Radiografía de Colombia

Con una población femenina de 26 millones, el desafío del país está en garantizar acceso equitativo a servicios de calidad, especialmente para las poblaciones más vulnerables. Reducir las desigualdades en la atención es la vía más efectiva para salvar miles de vidas cada año, como lo revelan investigaciones recientes.

Para 2022 se reportaron 17.018 casos nuevos de cáncer de mama en el país, lo que equivale al 27 por ciento de todos los cánceres en mujeres, con una incidencia de 208 casos por cada 100.000 pacientes, según el Instituto Nacional de Cancerología. Esta cifra está tres veces por encima del cáncer colorrectal, el segundo en incidencia entre las colombianas: 9,3 por ciento con 5.708 casos nuevos anuales.

Pese a este panorama, apenas el 13 por ciento de los casos son mortales cuando se accede a un diagnóstico y tratamiento oportunos. Sin embargo, las condiciones socioeconómicas pueden ser determinantes en la supervivencia. De acuerdo con un estudio publicado en abril pasado en la revista Cancer Epidemiology, investigadores colombianos realizaron un metaanálisis de 8.020 casos registrados entre 2008 y 2017 en cuatro ciudades del país que concluyó que la tasa de supervivencia depende de factores como el contexto de las pacientes. La tasa global de supervivencia, cinco años después, llegó al 72,5 por ciento; y se redujo casi a la mitad en mujeres mayores de 70 años, de estratos socioeconómicos bajos y afiliadas al régimen subsidiado de salud.

La radiografía sobre las disparidades sociales y la relación con la menor supervivencia del cáncer de mamá en Colombia son preocupantes. La falta de información, los pocos recursos y el menor acceso al tratamiento son los principales retos. Los países que han obtenido un descenso sostenible en la mortalidad lo han hecho a partir de medidas como acceso a programas de tamizaje con mamografía de forma continua y oferta de servicios oncológicos en ciudades pequeñas o en la ruralidad y con disponibilidad a medicamentos de última generación.