Hay tensión política en España tras amenazas de muerte contra el líder de Podemos

Amenazas de muerte y balas enviadas, entre otros, al líder del partido de izquierda radical Podemos, Pablo Iglesias, tensaron este viernes la campaña de las elecciones regionales en Madrid del 4 de mayo, relevantes para el tablero nacional.

Iglesias, que renunció recientemente a su puesto de vicepresidente en el gobierno de coalición del socialista Pedro Sánchez para competir en Madrid, abandonó bruscamente un debate electoral organizado por la radio Cadena Ser cuando la candidata del partido de extrema derecha Vox puso en duda la veracidad de esas amenazas.

“En democracia no son aceptables las amenazas de muerte, no es aceptable poner en duda que se producen esas amenazas”, declaró Iglesias a la prensa.

“No nos creemos nada” procedente del gobierno o de Pablo Iglesias, replicó Rocío Monasterio, candidata madrileña del pujante partido Vox, tercera fuerza en el Congreso nacional.

Tras la marcha del líder de Podemos, los otros candidatos de izquierda rechazaron continuar debatiendo con la candidata de Vox, quedando suspendido el debate.

Además de Iglesias, que acusa a la “ultraderecha” de estar en el origen de estas amenazas, también recibieron cartas con balas el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y la directora de la Guardia Civil, María Gámez.

La carta enviada al exvicepresidente contenía cuatro balas de un fusil de asalto y el siguiente mensaje: “Tu mujer, tus padres y tú estáis condenados a la pena capital, tu tiempo se agota”.

“Hoy soy yo pero, si continúan la impunidad y el blanqueamiento mediático de la ultraderecha, mañana serán otros compañeros”, dijo Iglesias en la víspera en Twitter.

Estas cartas, en un contexto de fuerte polarización política en España, fueron condenadas sin reservas por el resto de la clase política, excepto Vox.

“Es absolutamente inadmisible”, declaró el dirigente del conservador Partido Popular, Pablo Casado, que pidió investigar el origen de las misivas.

El jefe de gobierno Pedro Sánchez condenó en la víspera “las graves amenazas”. “Ante las amenazas y la violencia, justicia y democracia”, escribió en Twitter.

“Nuestra rotunda condena a las graves amenazas recibidas por Marlaska, Gámez e Iglesias”, tuiteó Sánchez junto con el enlace a las noticias sobre las cartas.

“Para afrontar cualquier discrepancia, la palabra. Ante las amenazas y la violencia, justicia y democracia”, escribió Sánchez.

Estas amenazas de muerte se producen en medio de la tensa campaña de las elecciones autonómicas en Madrid, que se celebrarán el 4 de mayo.

La amenaza incluye “material de guerra”

En la denuncia cursada, a la que tuvo acceso Europa Press, relata que la misiva con las amenazas llegó a la sede del Ministerio del Interior y en su interior había cuatro balas de gran calibre, que se asemejan a las usadas con ‘cetme’ o un “fusil de asalto”.

También indica que el escrito de la carta indicaba literalmente ‘Pablo Iglesias Turrión has dejado morir a nuestros padres y abuelos. Tu mujer, tus padres y tu estáis sentenciados a la pena capital. Tu tiempo se agota’.

Por todo ello, entiende que estos hechos constituyen una “grave amenaza contra su vida y la de su familia, dado que se trata de una amenaza que incluye material de guerra, que en apariencia es real y es usada como arma de fuego de gran calibre”. Luego detalla que al tratarse de una bala que corresponde a un fúsil de “precisión y potencia”, deduce que la carta amenazante fue remitida por una persona que tiene acceso a este tipo de armas de fuego.

Finalmente, demanda que se practiquen diligencias para identificar a los posibles autores de las amenazas y se inicie una investigación judicial, dando traslado de la denuncia a al Fiscalía y reclamando que se incorpore en estas pesquisas a la policía científica.

Manifestaciones

Hace algunos días, cuatro detenidos y 35 heridos dejaron los disturbios ocurridos durante un mitin del partido ultraderechista Vox en Madrid, según las autoridades, unos hechos que generaron un cruce de críticas entre la derecha y la izquierda.

Unos 2.000 manifestantes anti-Vox y la policía protagonizaron fuertes choques durante el acto del partido celebrado al aire libre en Vallecas, un barrio en el sur de la capital española que suele votar mayoritariamente a la izquierda.

Tras entonar cantos antifascistas, los manifestantes lanzaron piedras y otros objetos contundentes contra los agentes, quienes los repelieron con cargas y porrazos.

Por los hechos, fueron detenidas “cuatro personas, tres de ellas menores de edad”, indicó en ese momento una portavoz de la Policía Nacional.

Resultaron heridos 21 agentes de policía, diez de los cuales requirieron ser tratados posteriormente en un hospital, aunque ninguno grave.

Los servicios de emergencia informaron en Twitter que atendieron a otras 14 personas, sobre todo por heridas, “contusiones y abrasiones”. Dos de ellas “han requerido traslado hospitalario”, detallaron.

El líder de Vox, Santiago Abascal, presente en el mitin de precampaña para las elecciones regionales en Madrid del 4 de mayo, responsabilizó al ministro del Interior del gobierno de izquierda de “las agresiones”.

El dispositivo policial “no impidió que fuésemos acosados, increpados, a muy poca distancia” y “las piedras y las botellas volaban por encima de nuestras cabezas”, señaló Abascal a la cadena Antena 3, denunciando un “acto de intimidación”.

“Mi rotunda condena de la violencia y el acoso contra cualquier partido democrático”, escribió en Twitter el líder del Partido Popular (PP, derecha), Pablo Casado.

“Los ultras de Vox han ido a provocar violencia a Vallecas (...) Las imágenes son inequívocas: se ve a un ultra lanzar objetos contra los vecinos y a Abascal romper el cordón policial junto a sus matones para provocar una carga” policial, denunció en Twitter Pablo Iglesias, candidato de la izquierda radical de Podemos para las elecciones madrileñas.

“No es verdad”, respondió Abascal, acusando a su vez a Iglesias de ser “un mentiroso patológico”.

*Con información de AFP y Europa Press