Nación
Así fue la condena a 30 años de cárcel en Estados Unidos a Gilberto Rodríguez Orejuela
El capo del narcotráfico fue enviado a los Estados Unidos en el 2004 para responder por graves delitos de narcotráfico.

La sangrienta guerra que libraron los carteles de Medellín y de Cali finalizando los 80 y a comienzos de los 90 dejó una estela de muerte y terror en el país.
La confrontación fue liderada en su momento por Pablo Escobar, jefe del cartel de Medellín, y Gilberto Rodríguez Orejuela, conocido como el ajedrecista. Gilberto, el mayor de los hermanos Orejuela, nació en Mariquita, Tolima, en 1949, donde también nació su hermano Miguel Ángel, juntos formarían más adelante el temido cartel de Cali.

Quienes conocieron a Gilberto, lo definían como una persona ambiciosa, metódica, carismática, bien educado, y muy analítico. Como persona pública, se presentaba como un gran empresario, pero su círculo cercano sabía de los orígenes de sus negocios, narcotráfico.
Junto a su hermano, y José Santa Cruz Londoño, otro narcotraficante de la época, formaron una organización delincuencial denominada Los Chemas, dedicada a la piratería terrestre y al contrabando. Metidos ya en el mundo delincuencial, fueron conociendo personas como Helmer Herrera, alias Pacho Herrera, quien era un ‘maestro’ para el blanqueo de capitales en Nueva York.
Con el poder que habían adquirido con su banda Los Chemas, decidieron ir más allá y se metieron en el negocio del narcotráfico, creando el Cartel de Cali, logrando poner en Nueva York, cuatro de cada cinco gramos de cocaína que se vendían en esa ciudad.

Para los años 1984 en adelante, el Cartel de Cali tenía un poderío muy notable, era uno de los principales carteles del narcotráfico al lado del cartel de Medellín, manejado por Pablo Escobar.
Aunque habían definido líneas claras de las zonas para no entrar en confrontación, su distanciamiento fue notorio, tras algunas acciones terroristas que comenzó a ejecutar Pablo Escobar, como lo fue el crimen del ministro de Justicia Rodrigo Lara Bonilla. La guerra fue a muerte con el cartel de Medellín.
Bloque de búsqueda
La batalla, que iban ganando los carteles del narcotráfico en Colombia, obligó al Estado a pedir ayuda internacional, específicamente de los Estados Unidos. Con el apoyo de las autoridades norteamericanas, se conformó el famoso Bloque de Búsqueda, que no era más que unidades especializadas que tenían como único objetivo atrapar a los capos del narcotráfico, obviamente en su lista figuraban los hermanos Rodríguez Orejuela.
El Bloque de Búsqueda comenzó a operar y dio resultados el 9 de junio de 1995, cuando en un lujoso escondite en Cali, fue ubicado Gilberto Rodríguez Orejuela. Luego de su captura, la justicia nacional lo condenó a 12 de años de prisión, pagando efectivamente siete, y quedando libre, tras un polémico fallo judicial, en donde obtuvo una considerable rebaja de pena por buena conducta.
Tras recobrar su libertad, las autoridades colombianas no le perdieron rastro y lo capturaron de nuevo a los pocos meses, esta vez fue enviado a los Estados Unidos en calidad de extraditado en el 2004. Ante las autoridades norteamericanas, el ajedrecista fue enjuiciado por el envío de 100 kilos de cocaína. Su condena fue de 30 años de prisión.
Las matemáticas eran simples, la condena del ajedrecista se acabaría en el 2034 cuando ya cumpliera 95 años de edad, contado que su estado de salud ya estaba deteriorado. Las autoridades internacionales acusaron al Cartel de Cali de producir el 80 por ciento de la producción de cocaína a nivel mundial.
Otro de los hechos que marcó la vida de los Orejuela, fue la guerra contra Pablo Escobar, a quien en 1988 lo atacaron poniéndole una poderosa carga explosiva en el edificio Mónaco, donde vivía la familia del jefe del Cartel de Medellín.
A partir de ese momento, los dos carteles iniciaron una confrontación, que dejó una estela de muerte en Colombia, en donde murieron decenas de personas inocentes, con la activación constante de carros bomba en el país.