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Unos 88 millones de pesos al mes, deja en pérdidas la línea de emergencia. | Foto: Tomada de la página de la Secretaría de Gobierno.

BOGOTÁ

La línea de emergencias 123 está en peligro

El canal responsable de atender situaciones de emergencias en la capital genera millonarias pérdidas.

15 de noviembre de 2013

Desde hace ya ocho años se vienen denunciado las famosas llamadas falsas que entran a la línea de emergencia, realizadas por personas o niños que llaman a burlarse, despistar o simplemente conversar con los funcionarios que la atienden. Lo que la gente no conocía hasta ahora, es cuánto le está costando al Distrito semejante 'chistecito'.


Algunas cifras desfavorables para la Línea de Emergencias 123 salieron a relucir por un derecho de petición interpuesto por el partido político MIRA, ante la Secretaría Distrital de Gobierno y el Fondo de Vigilancia y Seguridad de Bogotá.

En el documento, se dan a conocer las millonarias pérdidas que le está generando al Distrito la manutención de la línea, por las llamadas falsas que a menudo realizan los ciudadanos para torpedear el esquema de operación.

La diferencia de las llamadas que son efectivas y falsas no es mucha. El promedio mensual de las llamadas que recibe la línea es de 1'895.890, de las cuales 110.432 han sido llamadas falsas y sólo han sido efectivas 160.790.

El costo de operación por llamada mensual es de 799 pesos. Y aunque la cifra no es alarmante, si se multiplica por el número de llamadas falsas, esto le estaría costando al Distrito unos 88’235.168 pesos mensuales, un dinero que realmente va a la basura.

En lo que va corrido del 2013, se han realizado 17’063.008 llamadas a la línea de emergencias, de las cuales 1’325.184 han sido falsas y 1.929.483 efectivas. Lo que quiere decir que aproximadamente 13 millones de llamadas se están realizando con otros objetivos que no le competen a la línea.

El coordinador de la NUSE 123, explica que esas son llamadas no conducentes, y que “la ciudadanía mal informada está utilizando la línea para llamar a preguntar direcciones y cualquier otro tipo de información”. 

Según Carlos Eduardo Guevara, vocero del partido político MIRA y quien interpuso el derecho de petición, la culpa de la millonaria suma de dinero por las llamadas falsas, la tiene el Distrito. “La Administración no le ha dado el rigor que debe tener una línea de emergencia, eso parece más un call center. Una línea de emergencia no debería demorarse tanto en los tiempos de acción”.

Hernán Silva opina lo contrario. Para él la culpa es de la ciudadanía que no toma consciencia del servicio que brinda el Distrito. Según Silva, ya se iniciaron unas campañas educativas y comunicativas a través de la Secretaría de Educación en Alcaldías Locales, canales de televisión nacional y radio, con el fin de que la gente la valore.

Si bien es cierto que es un servicio gratuito para los capitalinos, no quiere decir que el Distrito no pague por él, pues la ETB les cobra esas llamadas. 

Por otro lado y el aspecto en el que más hace énfasis Silva, es que esas llamadas falsas entorpecen la ejecución de emergencias reales. “Esas llamadas saturan el sistema y lo que puede causar es que no le entre la llamada a una persona que sí este requiriendo ayuda inmediata”.

Aunque el tema de las llamadas falsas no es nuevo, este año se han incrementado. Por esto, Silva advierte que pasarán un informe a la Fiscalía y a la Policía con todos los números de teléfono de las personas que llaman a “burlarse de la línea”, de esta manera las entidades podrán revisar los datos y ubicarán a las personas para efectos penales.

“El próximo año la línea 123 va a ser muy diferente porque Bogotá va a estar dotada de la mejor tecnología e infraestructura y su presupuesto de 2014 será de 150.000 millones de pesos”, afirmó Silva.

Las llamadas falsas se han denunciado desde que entró en funcionamiento la línea en 2005 y a pesar de las estrategias que se han realizado desde la Administración, las personas siguen sin darle un uso acertado.