Alcalde de Samaniego pide respeto por el dolor de su pueblo/Fotomontaje SEMANA | Foto: Fotomontaje SEMANA

NACIÓN

Alcalde de Samaniego pide respeto por el dolor de su pueblo

Óscar Pantoja, alcalde de Samaniego, pide que cesen las burlas y las críticas por su viaje a Bogotá a una cita en la Casa de Nariño.

22 de agosto de 2020

El alcalde de Samaniego, Óscar Pantoja, pidió respeto por el dolor de esa población, luego de las críticas que él ha recibido por su viaje a la Casa de Nariño en Bogotá donde sostuvo un encuentro con el presidente Iván Duque, días después de la masacre de ocho jóvenes en una finca de ese municipio.

Vea aquí la entrevista del alcalde Pantoja con SEMANA:

El mandatario local dijo que vio en ese encuentro la oportunidad, no solo de contarle al presidente Iván Duque, sino a Colombia, la delicada situación de orden público que se presenta en ese municipio. “Es que es muy importante para un municipio como Samaniego que ha vivido por más de 30 años la violencia, sitiado por diferentes situaciones. En lo que va corrido del año vamos cerca de 32 homicidios (...) Lo del viaje es algo que pasa a un segundo plano, lo importante era acceder a conversar con el presidente y poder informar todo lo que corresponde al panorama”, explicó en Semana.

Mapa de masacres recientes en Colombia:

Además, Pantoja insistió en que la visita al presidente Duque en Bogotá era muy importante para expresarle a él personalmente la magnitud de lo que está pasando en esa población, “que él ponga los ojos en Samaniego” y abrir esperanzas para cosas buenas.

El mandatario local dijo que durante el encuentro con el presidente Duque hablaron sobre la delicada situación de orden público en esa población. “En este conversatorio se habló sobre el tema puntual que debe ser la justicia, la investigación para esclarecer los hechos. Pero también se habla de las problemáticas y las soluciones a las que debemos llegar”.

Además indicó que el Gobierno se comprometió a adelantar proyectos de infraestructura, salud y  educación en Samaniego.

“Las peticiones que le hicimos al señor presidente son todas enfocadas en prevenir que los jóvenes tengan un espacio diferente al de la vida. Entonces él se comprometió directamente con el municipio a atender con un programa estipulado, los diferentes requerimientos que tiene el municipio”, agregó.

Así mismo, indicó que con la visita del presidente Duque, buscan que todos los programas que el Gobierno tiene se fortalezcan en Samaniego. También recalcó que ese municipio necesita que la infraestructura mejore, al igual que en los colegios.

“El presidente nos ha tendido la mano, nosotros vimos en esta desgracia una luz y gracias a él vamos a darle al municipio la oportunidad de mostrar algunas oportunidades que se pueden destacar”, indicó Pantoja.

Las declaraciones del alcalde de Samaniego se conocen luego de que en ese municipio, ubicado en Nariño, se conociera una de las masacres que han conmocionado al país en los últimos días. 

Cifras víctimas de homicidios colectivos:

Los hechos ocurrieron el 15 de agosto cuando cuatro hombres encapuchados llegaron a una finca de la vereda Santa Catalina, lugar donde esa noche todo era fiesta, pues un grupo de 50 jóvenes decidieron reunirse para departir un momento con música y cerveza.

A sangre fría, los hombres armados comenzaron a disparar contra las personas que se encontraban el lugar, sin escatimar a ningún asistente. Hubo muchos heridos, pero las víctimas mortales fueron ocho jóvenes, que según las autoridades, no estarían entre las personas que buscaban los encapuchados. De esta manera, la Policía anotó que las víctimas no serían el blanco directo de la matanza.

SEMANA habló con Javier, uno de los sobrevivientes de esta masacre, quien aseguró que alcanzó a detallar minuciosamente a los cuatro hombres con capucha que irrumpieron en el asado a las 9:30 p. m., mientras él departía con sus amigos.

En pocos segundos, los observó de pies a cabeza en busca de un brazalete o alguna prenda distintiva del ELN. Pensó que eran miembros de esa guerrilla, que suelen patrullar por esa zona rural, así que se quitó la gorra para que lo reconocieran. La mayoría de los 40 jóvenes que departían esa noche no vivían en Samaniego, pero sí nacieron ahí. Eran hijos de la región y eso –pensó– quizás podía protegerlos. (Lea aquí su declaración completa)