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10 tips de educación japonesa

La comida en las escuelas es preparada por personal especializado y médicos para que tengan los nutrientes necesarios para su desarrollo físico e intelectual.

10 de abril de 2017

La educación japonesa es considerada una de las mejores del mundo. Estas son algunas de sus prácticas para lograr tal reconocimiento. 

No hay evaluación en los primeros años

Los estudiantes japoneses no tienen exámenes hasta el cuarto grado de primaria. Es decir, cuando tienen entre 9 y 10 años.  Para ellos, en los primeros años de escuela los conocimientos académicos no son lo más importante; el enfoque es en valores como respeto, paciencia, generosidad, compasión, disciplina, control y cuidado de la naturaleza.

Las vacaciones se reparten durante el año

El inicio del año escolar es el 1 de abril, una fecha que coincide con la floración de Sakura (Cerezo) y que marca el comienzo de la primavera. Además, su año escolar permite que los japoneses descansan seis semanas en verano y dos en invierno y primavera. De esta forma tienen tiempos de receso para recuperar fuerzas durante todo el año.

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Ellos limpian la escuela

Los japoneses aprenden a cuidar y mantener en orden sus salones ya que son ellos mismos los que limpian las aulas, los pasillos y los baños de sus escuelas. Ya que gastan una buena parte de su tiempo haciendo aseo, generalmente suelen cuidar mucho su entorno y respetar su trabajo como el de los demás.

Comida saludable

La comida de los estudiantes de primaria y secundaria de los japoneses es preparada especialmente por personal capacitado y por personal médico para que la alimentación sea la adecuada y les proporcione los nutrientes necesarios para desarrollo físico e intelectual de los estudiantes. Además, tienen la costumbre de comer en el salón con todos sus compañeros y con sus profesores, lo que les permite relacionarse en otro espacio más informal.

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Educación adicional

Desde pequeños los niños japoneses toman clases adicionales que van de acuerdo con sus capacidades. Por ejemplo, si un niño es bueno en música, entonces tomará clases particulares de algún instrumento. Los pequeños generalmente llegan a sus casas a eso de las nueve de la noche, después de sus clases extras.

La importancia de la poesía y la caligrafía

La poesía y la caligrafía son muy importantes en Japón. Estas materias se toman muy en serio para hacer que la cultura japonesa se mantenga y para recordar tradiciones milenarias, como escribir con una pluma de bambú sobre un papel de arroz.

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Usar uniforme

En la secundaria es obligatorio el uso del uniforme, ya que permite que todos los japoneses vean al otro como igual, sin importar modo de pensar, personalidad, capacidad económica, etc.

Asistencia máxima

En Japón es casi impensable que un niño falte a la escuela o que llegue tarde. Esto es posible gracias a que la educación durante los primeros nueve años es obligatoria, pero el 97% de los alumnos continúa sus estudios superiores. La posesión de títulos es fundamental para ocupar cierta posición social en ese país. Por lo general, los alumnos tienen que someterse a varios exámenes para acceder a los institutos y a las universidades.

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La importancia del examen final

Si bien cuando los japoneses son pequeños no son sometidos a muchas evaluaciones, para ingresar a la universidad deben pasar un examen que define si podrán continuar sus estudios académicos. Por eso, suelen prepararse durante meses para tener un buen puntaje.

Elección de la carrera

Como solo pueden aplicar a una universidad, es normal que busquen una profesión para la que se consideran realmente buenos o superiores. La idea no es mejorar aquello en lo que son malos, sino perfeccionar aquello para lo que ya tienen capacidades. Esto hace que sean los mejores en cada disciplina. Además, esta temporada en la que se dedican únicamente a aquello que les llama la atención significa un descanso después de tantas horas de estudio.