Especialistas en nutrición recomiendan 5 raciones diarias entre frutas y verduras. Foto: Getty Images.
Especialistas en nutrición recomiendan 5 raciones diarias entre frutas y verduras. Foto: Getty Images. | Foto: Foto: Getty Images.

Vida Moderna

Glucosa alta: el superalimento que ayuda a regular los niveles

Los azúcares que se ingieren con los alimentos son transformados por el metabolismo en glucosa.

12 de julio de 2022

La glucosa es un tipo de azúcar y es la principal fuente de energía del cuerpo, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Además, explicó que una cantidad excesiva o insuficiente de glucosa en la sangre podría ser un signo de un problema médico serio, pues los niveles altos de glucosa en la sangre (hiperglucemia) pueden ser un signo de diabetes, una enfermedad que puede causar serios problemas de salud a largo plazo, ya que pueden dañar los ojos, los riñones y los nervios.

Por ello, si se tienen los niveles altos, El Universo reveló que “un estudio publicado en el diario oficial de la Asociación Americana de la Diabetes, realizado por el investigador Hila Zelicha, de la Universidad Ben-Gurion en Israel, reveló que la lenteja de agua llamada mankai, tiene las características que lo catalogarían como un superalimento por sus propiedades de control glucémico al consumir carbohidratos”.

Asimismo, reveló que el alimento tiene vitaminas, minerales y que el 45 % de su contenido es proteico.

No obstante, al igual que con cualquier alimento que se quiera incluir en la dieta diaria, es importante consultar al médico tratante o a un nutricionista sobre cuál es la mejor manera de consumir, y si las condiciones médicas ya existentes no son un impedimento para beneficiarse de todas las propiedades del alimento ya nombrado, pues la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.

Por su parte, se ha demostrado que existen algunas otras medidas simples relacionadas con los hábitos que previenen eficazmente o retrasan la aparición de la diabetes y se deben seguir estas conductas, según la Organización Mundial de la Salud (OMS):

  • Conseguir y mantener un peso corporal saludable.
  • Realizar al menos 30 minutos de actividad física de intensidad moderada la mayoría de los días. No obstante, para controlar el peso puede ser necesario aumentar la intensidad.
  • Tomar una alimentación saludable, sin azúcar ni grasas saturadas y tener en cuenta que algunos alimentos que suben la insulina en la sangre son: chocolates, caramelos, mermeladas, miel, helados, gaseosas, alcohol, galletas dulces, comida rápida, harina de trigo refinada, cereales azucarados, entre otros.
  • No consumir tabaco, puesto que fumar aumenta el riesgo de sufrir diabetes y enfermedades cardiovasculares.

¿Cuándo se considera que una persona padece diabetes?

Cuando el metabolismo de la insulina no funciona correctamente, las células de los tejidos dejan de asimilar correctamente la glucosa y esta se acumula en la sangre.

El verdadero problema del azúcar | Educando ConCiencia, con el Dr. Carlos Jaramillo

Por ello, de acuerdo con el Grupo Sanitas de España, lo recomendable es que la glucemia se mida al levantarse por la mañana y antes del desayuno, y se considera normal si los niveles de glucosa se sitúan entre los 70 y 100 mg/dl en ayunas y en menos de 140 mg/dl dos horas después de cada comida.

Sin embargo, se diagnostica diabetes si el nivel de glucosa en ayunas es de 126 mg/dl (7.0 mmol/L) o superior en dos exámenes diferentes. Los niveles entre 100 y 125 mg/dl (5.5 y 7.0 mmol/L) se denominan alteración de la glucosa en ayunas o prediabetes. Estos niveles son factores de riesgo para la diabetes tipo 2.

Dicho lo anterior, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación reveló que algunos de los signos y síntomas de la diabetes tipo 1 y tipo 2 son:

  • Aumento de la sed.
  • Micción frecuente.
  • Hambre extrema.
  • Pérdida de peso sin causa aparente.
  • Presencia de cetonas en la orina (las cetonas son un subproducto de la descomposición de músculo y grasa que ocurre cuando no hay suficiente insulina disponible).
  • Fatiga.
  • Irritabilidad.
  • Visión borrosa.
  • Llagas que tardan en cicatrizar.
  • Infecciones frecuentes, como infecciones en las encías o en la piel, e infecciones vaginales.