TENDENCIA

La locura de Pokémon Go

Este videojuego gratuito que utiliza el concepto de realidad aumentada está causando furor en el mundo.

16 de julio de 2016

En menos de una semana, Pokémon se volvió tendencia en las redes sociales y en los medios de comunicación. Noticias sobre docenas de personas en Central Park de Nueva York con sus celulares en frente capturando criaturas imaginarias, accidentes de tránsito por jugarlo indebidamente, criminales que aprovecharon para robar a los jugadores distraídos y hasta gente que encontró a su media naranja llenaron las páginas de los principales medios.

Aunque se calcula que hay más de 21 millones de usuarios activos, muchos no entienden de qué se trata ni por qué tanto alboroto por un videojuego. La razón es sencilla: Pokémon Go, la versión más avanzada de un juego que marcó a una generación de niños y jóvenes a finales de los años noventa, utiliza el concepto de realidad aumentada.

Aunque esta tecnología no es nueva y muchos ya la emplean, este juego electrónico logró sacarla de un nicho de jugadores para llevarla a las multitudes. Y a diferencia de otros videojuegos, que encierran a las personas en su cuarto, este ha sacado a todos a las calles a buscar animalitos que solo existen en el mundo digital. No hay que confundirlo con realidad virtual, que es la posibilidad de transportarse a otro universo sin necesidad de moverse. La realidad aumentada le permite al usuario cubrir el mundo real a medida que lo transita con una capa de mundo digital. Para esto utiliza la cámara y el GPS del dispositivo celular, así como los datos de Google Maps. Gracias a esto, los jugadores pueden ver a los pokémones correr libres entre la multitud por las calles, los parques, la oficina o en el baño de su propia casa.

Lo anterior convirtió al juego en un hito. La aplicación, disponible sin costo para sistemas Android e iOS, se ha descargado más de 15 millones de veces. El 12 de julio había superado a Facebook, Instagram y Tinder en promedio de uso diario. También rebasó las búsquedas de pornografía en internet y, por supuesto, valorizó a Nintendo como no sucedía desde 1983, cuyas acciones, según el diario USA Today, subieron a 12.000 millones de dólares. Todo esto a pesar de que solo ha sido lanzado en Estados Unidos, Australia, Nueva Zelanda y Alemania. En Colombia estará disponible en los próximos días.

La idea del juego es atrapar a todas las criaturas pokémones (del japonés, monstruos de bolsillo) para luego enfrentarlos con los de otros jugadores. Para entrenarlos hay gimnasios virtuales localizados en sitios reales, como la Casa Blanca y el Pentágono, hecho que ha generado problemas de seguridad. Varias entidades, desde los directivos de la estación de Policía de Darwin, Australia, hasta los del Cementerio Nacional de Arlington y del Museo de la Memoria del Holocausto, en Washington D. C., prohibieron el juego en sus recintos.

Otros, como un párroco de una iglesia en Boston, se quejan de la avalancha de gente que ahora ve alrededor gracias a que ese lugar ha sido declarado zona de entrenamiento de pokémones. Las organizaciones que protegen los derechos de los niños han dicho que el videojuego podría hacerlos presa fácil de pederastas y criminales. Niantic Labs, la firma que desarrolló el software, notificará los lugares inadecuados donde se encuentran los pokémones para eliminarlos de los mapas virtuales de la aplicación y ha dicho que mejorará su seguridad. Pero algunos dicen que hoy el consejo de los padres a sus hijos –antes era no recibir caramelos de un extraño– es no jugar Pokémon Go con desconocidos.

Otros ven con buenos ojos la locura suscitada por el juego porque no solo ha puesto a caminar a la gente, sino que promueve la interacción entre las personas y la exploración de su vecindario, pues ahora observan edificios y lugares que antes no les llamaban la atención. Aun así, los expertos calculan que la moda del Pokémon Go pasará. Pero lo que quedará será el concepto de realidad aumentada que se irá perfeccionando hasta llegar a convertirse en una manera natural de relacionarse con el mundo. Si bien la experiencia en el juego es muy básica, se anticipa el desarrollo de gafas con auriculares que la harán mucho más realista. La gente, por ejemplo, podrá caminar por una calle y gracias a la magia de la realidad aumentada observar el menú de un restaurante u ofertas de un almacén. Pokémon Go simplemente es la bienvenida a ese futuro.