Según la tradición litúrgica cristiana, el tiempo de Adviento es un periodo de preparación espiritual antes de la celebración de la Navidad. Este ciclo se compone de cuatro domingos consecutivos que comienzan siempre cuatro semanas antes del 25 de diciembre y cada uno tiene un significado particular, simbolizado por una vela encendida en la tradicional Corona de Adviento.
Teniendo en cuenta este calendario, el tercer domingo de Adviento de 2025 cae el 14 de diciembre, y es conocido tradicionalmente como el “Domingo de Gaudete”, señala la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB, por sus siglas en inglés) a través de su sitio web.
El color de la vela del tercer domingo
De acuerdo con las tradiciones litúrgicas más extendidas entre católicos, el color de la vela que se enciende el tercer domingo de Adviento es el rosa.
Esta vela, distinta en color a las demás que son en su mayoría moradas durante Adviento, simboliza la alegría y el júbilo de estar más cerca de la llegada de Cristo, explica el portal Hallow de España.
Este tono rosa, según señalan ambas fuentes, no es un color elegido al azar, ya que, litúrgicamente, se utiliza en la vestimenta sacerdotal y en los ornamentos de la iglesia en este domingo como signo de gozo y alivio en medio de la penitencia del Adviento.
“El Adviento nos invita a un compromiso de vigilancia, a mirar más allá de nosotros mismos, a ensanchar la mente y el corazón para abrirnos a las necesidades de las personas, de los hermanos y al deseo de un mundo nuevo”, Papa Francisco, Ángelus, 2018.
¿Cómo bendecir la Corona de Adviento en Navidad?
La Corona de Adviento, también llamada “Corona de las luces de Adviento”, es un elemento que “expresa la alegría del tiempo de preparación a la Navidad”, invitando a las familias a reunirse para orar y compartir reflexiones con el propósito de preparar sus corazones para recibir al Salvador, explica El Bendicional.
Por su parte, la Agencia Católica de Informaciones (ACI Prensa), precisa que la forma correcta de bendecirla es realizando una oración especial cada día o una vez empiece el periodo de Adviento, de ser posible siempre en familia.
Las velas se encienden una por semana, durante cada uno de los cuatro domingos de Adviento, y el ritual tradicional para hacerlo consiste en reunirse en familia para realzar oración correspondiente a ese domingo, pidiendo a Dios paz, amor, esperanza y alegría.