Boyacá se ha consolidado como uno de los departamentos más acogedores del país, un destino en el que los viajeros se sienten como en casa. Viajar hasta esta región es adentrarse en el corazón histórico y cultural de Colombia.
Es un territorio que se destaca por su riqueza arquitectónica, con iglesias, casonas y calles empedradas que transportan al pasado, así como por su vibrante identidad campesina y tradiciones que se mantienen vivas en cada rincón.
En Boyacá los turistas tiene la oportunidad de ver y disfrutar de una gran belleza natural que abarca páramos como el de Ocetá, lagunas como la de Tota y pueden apreciar paisajes verdes, mientras degustan de productos típicos como la arepa boyacense o el queso de hoja, que hacen del viaje una experiencia auténtica.
Este departamento está conformado por 123 municipios y uno de ellos lleva su mismo nombre. Se trata de Boyacá, situado en la provincia de Márquez. Es un pequeño lugar de menos de 50 kilómetros cuadrados de extensión, en donde viven unas 5.000 personas.
El nombre de Boyacá proviene del vocablo muisca “Boica”, que en lengua muisca significa tierra de mantas y da origen al municipio de Boyacá, según el Sistema de Información Turística de Boyacá (Situr).
En este poblado los viajeros tienen la posibilidad de conocer una de las iglesias más hermosas del departamento. Gracias a su tamaño y diseño, es catalogada como una de las joyas arquitectónicas de la región, rodeada de pequeñas construcciones que brindan un aire de poblado gótico medieval.
Lugares de interés
Además, allí es posible visitar áreas naturales como el Alto de San Pedro, donde los amantes de la aventura y la adrenalina pueden practicar parapente, y el Alto de la Trinidad, donde está el santuario a la Santísima Trinidad, lugar de peregrinación católica en días de Semana Santa.
Los boyacenses llevan a cabo actividades religiosas como la fiesta de San Isidro Labrador, patrono del municipio y el Reinado Departamental de la Alpargata, evento que busca resaltar y difundir una de las actividades más representativas del municipio: la elaboración de alpargatas en materiales como fique y algodón.
En el municipio de Boyacá los viajeros admiran toda la tradición ancestral de sus pobladores y pueden probar su riqueza gastronómica con platos como la sopa de cuchuco con espinazo de cerdo, envueltos de mazorca y arepas de maíz hechas en piedra de laja.
Un poco de historia
De acuerdo con Situr, según las crónicas de Fray Pedro de Aguado y de Fray Alonso Zamorra, Gonzalo Jiménez de Quesada llegó a este poblado indígena en 1537 movido por su ambición de encontrar minas de esmeraldas.
El cacique Boica se rebeló ante el dominio español y fue degollado en Tunja, junto con seis caciques más, por orden de Hernán Pérez de Quesada. El municipio fue fundado en 1787 y en esta época sus habitantes se dedicaban a la explotación de la cal, con la que comerciaban en municipios de la provincia y en Santa Fe de Bogotá.