El pico y placa continúa siendo una de las estrategias más implementadas en las principales urbes del país, y Medellín forma parte de ellas. Esta normativa busca principalmente agilizar la movilidad en la ciudad y reducir los constantes embotellamientos que se presentan en las vías con mayor flujo de automotores.
Con esta medida, los conductores pueden disminuir el tiempo que pasan atrapados en trancones, lo que a su vez ayuda a rebajar los niveles de contaminación del aire y a generar un entorno más saludable para los habitantes de la capital antioqueña.
Para su aplicación, se definen jornadas y horas específicas en las que ciertos vehículos tienen prohibido transitar por diferentes sectores. Sin embargo, hay zonas en las que la medida no opera por tratarse de corredores exceptuados.
El esquema se organiza según la numeración de las matrículas: en los carros se toma el último número, mientras que en las motocicletas se utiliza el primero.
Según la programación establecida por la Secretaría de Movilidad de Medellín, este martes 2 de diciembre la restricción funcionará de la siguiente forma:
- Carros particulares: no podrán circular las placas finalizadas en 5 y 7.
- Motocicletas: tendrán prohibición aquellas cuyo número inicial sea 5 y 7.
- Taxis: deberán suspender operación los vehículos cuya placa termine en 6.
El horario para automóviles será de 5:00 a. m. a 8:00 p. m., mientras que para los taxis la restricción irá de 6:00 a. m. a 8:00 p. m.
En cuanto a los corredores libres de la medida en la segunda mitad del año, nuevamente se resaltan el Sistema Vial del Río, la avenida Las Palmas, el tramo de la quebrada La Iguana entre las carreras 63 y 80 y los corregimientos del municipio.
Asimismo, ciertos tipos de vehículos no están obligados a cumplir la restricción, siempre que cumplan los lineamientos oficiales. Dentro de estas excepciones se encuentran los automotores eléctricos, híbridos y aquellos impulsados por gas natural, siempre que cuenten con su matrícula al día.
Finalmente, las autoridades recuerdan que quienes incumplan la norma deberán asumir una sanción de $711.750 en 2025, además del posible traslado del vehículo a los patios.