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La esposa de Daniel Habif, explicó a través de sus redes sociales lo ocurrido en una de las calles de Londres cuando fueron atacados en medio de un ataque de intolerancia por un grupo de menores.
La esposa de Daniel Habif, explicó a través de sus redes sociales lo ocurrido en una de las calles de Londres cuando fueron atacados en medio de un ataque de intolerancia por un grupo de menores. | Foto: Instagram/ @anyharuiz

Reino Unido

Influencer Daniel Habif y su esposa fueron víctimas de ataque violento, intolerante y xenófobo en Londres

La mujer afirmó que la golpiza que recibieron surgió cuando intentaron abogar porque un grupo de hombres dejara de hostigar a una mujer que rebuscaba dinero cantando en la calle.

23 de agosto de 2022

A través de sus redes sociales, Anyha Ruiz, influencer mexicana y pareja del reconocido ‘motivador’ y actor Daniel Habif, dio a conocer a sus seguidores que, ella y su esposo, en días pasados fueron objeto de una brutal golpiza por parte de personas desconocidas, mientras adelantaba un viaje a la ciudad de Londres, en Reino Unido.

En la publicación, difundida a través de su cuenta de Instagram, Ruiz mostró algunas de las secuelas del ataque, que, según ella, estuvo motivado por un acto de intolerancia y xenofobia, ocurrido luego de que ella y Daniel, intervinieran al presenciar un hostigamiento, por parte de algunos trascendentes, en contra de una mujer que buscaba rebuscarse algún dinero cantando en una acera de una avenida londinense.

“Esto es lo que pasa cuando a pesar de ser un país de “primer mundo”, en casa no te dan los valores y el amor necesario para mirar a tu prójimo con empatía”, afirmó a través de las redes la mujer, quien lamentó la falta de empatía por parte de algunos trascendentes, que, además de presenciar el ataque contra la mujer, también se quedaron indolentes ante el ataque del que fueron objeto ellos.

Sorprendida que los jóvenes de menos de 21 años en Londres sean casi intocables y al saber esto ellos, usen toda esa Libertad de la forma más grotesca”, dijo la mujer a través de sus redes sociales, lamentando la situación, y la forma en la que ni siquiera las autoridades policiales intervinieron de manera oportuna. .

“Ellos actuaron cobardemente y muy violentamente… así fue como vivimos Londres, hace días”, explicó Ruz, quien explicó que los hechos ocurridos en días pasados surgieron cuando ella y Habif caminaban por la calle, en horas del anochecer, con dirección al hotel donde se encontraban hospedados, y decidieron intervenir cuando se percataron del ataque de cuatro jóvenes contra una artista callejera.

La mujer explicó que los agresores arremetieron contra ellos en plena vía pública, empleando botellas de vidrio; ataque que también fue complementado con “escupitajos, insultos xenófobos y golpes, cegados por el coraje y sin medir las consecuencias”.

Ruiz señala que los atacantes, en sus miradas “desbordaban ira y odio, su corporalidad era de zombies literal”, lamentando que, en medio de su ataque, estos no fueran ni siquiera conscientes de que con sus acciones podrían haber “acabado con la vida de otros seres humanos”.

Sobre las afectaciones en su cuerpo, la esposa de Daniel Habif admitió que él recibió un golpe en la espalda, mientras que ella resultó aún más afectada, al haber sido pateada por uno de los atacantes, resultando lastimada en uno de sus brazos; precisamente una de las imágenes que compartió a través de su cuenta de Instagram.

Aunque el ataque violento ocurrió hace algunos días, la mujer admitió que aún se encuentran en proceso de recuperación lamentando la acción de sus atacantes, a quienes calificó como “salvajes” que habían osado arremeter contra la artista callejera, a quien habían humillado públicamente, a la vez de haber averiado algunos de sus elementos de trabajo, un micrófono.

Ruiz recuerda que al momento en que ellos decidieron intervenir en defensa de la mujer, esta rogaba a sus agresores que ‘la dejaran trabajar’, pero estos hacían oídos sordos, y continuaban con sus actos cínicos, ante lo que ella y Habif no pudieron mantenerse ajenos, movidos por algo que ella aclara “va más allá de la razón”.

“Mientras más de 40 personas presentes presenciaron los hechos, nadie movió un dedo, ni gritó o si quiera intentó llamar a la policía”, lamentó la mujer.