“No es descabellado pensar que mi mamá se fue porque temía por su vida”

Aida Victoria Merlano Manzaneda, hija de la prófuga excongresista Aida Merlano, no ha dejado de dar declaraciones desde que una jueza decidió que debía afrontar en libertad el juicio por la fuga de su madre. Ya dijo que su madre se desnudaba ante cualquier persona sin el mayor desparpajo y que, además, no era ningún cordero para limpiarle los pecados a los políticos de turno. Detrás de todas esas declaraciones altisonantes, para algunos graciosas, para otros arteras, siempre está la voz serena de una mujer que calcular las palabras, que las rumia para extraer de ellas lo que exactamente quiere decir. Así quedó claro en la mañana de este miércoles cuando dio sendas entrevistas para Blu Radio.

La joven respondió dudas que han circulado por la opinión pública a fuerza de retórica como las razones del cambio de su nombre. Sin mayor misterio, dijo que el nombre con el que fue registrada fue Carolyna, “la cosa más antiestética de la vida”, dijo, razón por la quiso cambiarlo y lo hizo por Aida Victoria para demostrar “el amor que siento por mi madre”, pues en algún momento en un charla que tuvo con ella, esta la preguntó si se avergonzaba por todos los líos judiciales en los que estaba metida.

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Además, Aida Victoria contó que vive con una empleada del servicio y su hermano en Barranquilla, que en efecto tiene un costoso reloj Cartier y un iPhone 11 que decidió comprar cuando la Fiscalía le incautó su antiguo teléfono. Todos sus gastos los cubre con los ahorros que su madre tenía para casos de emergencia en una cuenta que esta a su nombre desde que tenía diez años de edad y que vino a utilizar en medio de la crisis familiar que viven tras la fuga; estaba tan desentendida de la cuenta que tuvo que ir al banco con una carta de poder y su antigua tarjeta de identidad.

La entrevista también trató sobre temas más difíciles, como las razones de su madre para fugarse, entre las que mencionó que la excongresista temía por su vida, hipótesis que ya había planteado la columnista de SEMANA; María Jimena Duzán; por otro lado, Aida Victoria mencionó que su madre sufre de un transtorno afectivo bipolar, por lo que “le cuesta llevar cierta línea emocional”. Sin embargo, ante la baraja de hipótesis, se decantó en que su madre pudo haberse fugado porque sufrió una “condena desmedida”.

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Ante las preguntas sobre qué sucedía en el consultorio, o cómo apareció la soga con la que se hizo la fuga, Aida Victoria respondía serena, argumentando que desconocía la aparición de dichos elementos y que, además, no estaba obligada a testificar en contra de su madre. Sin embargo, dio detalles sobre estas consultas: no era la primera vez que se veían en el consultorio, ya era conocida por la recepcionista y las enfermeras y esa tarde compró hamburguesas para el almuerzo de casi todos los empleados del piso, incluso de la dragoneante que acompañaba a la madre durante el tratamiento de diseño de sonrisa.

Sobre las restricciones impuestas por los guardines del Inpec —que en el caso del día de la fuga le dijo que no podía recibirle la hamburguesa para el almuerzo—, dijo: “A la primera consulta que yo fui con ella, me permitían acercarme pero no a menos de un metro, eso depende  del dragoneante, hay muchos que son buena gente y de repente se meten en los zapatos de un hijo que está viendo a su padre privado de la libertad”.

En entrevista con Caracol Radio, Aida Victoria tocó el tema que para muchos es importante: ¿Quiénes están detrás de su madre? A lo que respondió: "Pronto se conocerán las caras de los enemigos de mi mamá, de quienes la tienen en estas circunstancias y cuando esté mentalmente bien saldrá a aclarar las supuestas relaciones que tuvo". 

Aunque este testimonio parece indicar que ha estado cerca de su madre, Aida Victoria aclaró: "Mi madre es una mujer muy inteligente y estoy segura de que no se pondrá en contacto conmigo, ni con mi hermano porque sabe que podrían capturarla a través de nosotros". Y al igual que en Blu Radio, aseguró que su captura fue un acto más que temerario: "Una conducta extorsiva de la Fiscalía porque no había razón para que me capturaran y mucho menos en la forma en como lo hicieron porque siempre mostré interés en comparecer".

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