Home

Nación

Artículo

| Foto: Archivo SEMANA

NACIÓN

Celador del edificio de Rafael Uribe se suicidó: Medicina Legal

El director del instituto, Carlos Valdés, descartó que se tratara de un homicidio. El vigilante Fernando Merchán Murillo murió por hipoxia severa.

14 de diciembre de 2016

La incertidumbre por la muerte de Fernando Merchán, el vigilante del edificio Equus 66, terminó este miércoles luego de que el director de Medicina Legal, Carlos Valdés, entregó el informe de necropsia en el cual indica que el vigilante se suicidó.

Puede leer: "Heridas que tenía el celador no fueron determinantes para su muerte": Medicina Legal

El viernes 9 de diciembre, tan sólo cinco días después del crimen de Yuliana Samboní, el cadáver de Merchán fue encontrado en el baño del segundo piso de su casa en el barrio Castilla. Tras el hecho, se especuló sobre la causa del fallecimiento, incluso las autoridades no descartaron ninguna hipótesis.

Los exámenes toxicológicos fueron determinantes para establecer lo que le sucedió a Merchán. De paso permitieron descartar la hipótesis de un homicidio. “No encontramos ningún elemento de juicio que indicara que fue otra la manera de muerte”, dijo Valdés.

Le puede interesar: Aparece muerto celador del edificio de Rafael Uribe

Merchán perdió la vida debido a tres circunstancias. En primer lugar, un estado de anemia aguda, producto de las lesiones por elemento cortante, pues se sabe que se hizo cinco heridas incluidas dos en las articulaciones de su manos. 

Los galenos también encontraron depresión neurológica medicamentosa por el consumo de un antidepresivo de nombre Trazadona y asfixia posicional. La suma de estos tres elementos le produjeron al hombre de 58 años una hipoxia severa, es decir falta de oxígeno.

“Se logró determinar la manera de muerte violenta tipo suicidio”, manifestó el director de Medicina Legal.

El lunes pasado se puso en duda esa causa debido a que el informe inicial del Instituto indicó que las lesiones en el cuerpo no revestían la suficiente gravedad para explicar por sí mismas la muerte. Sin embargo, luego de este dictamen, las dudas quedaron disipadas.

Le puede interesar: Rafael Uribe Noguera: el arquitecto del mal

Ese mismo día, el CTI confirmó que la carta que fue hallada en la casa del celador, en la que escribió que no quería dañarle la Navidad a su familia, fue escrita de su puño y letra.

“Los manuscritos que fueron encontrados en el lugar de los hechos fueron realizados por el señor Fernando Merchán Murillo. Esto quiere decir que los documentos de una presunta despedida realmente corresponden a los rasgos de caligrafía que él tenía en vida”, aseguró el director de esa dirección, el general (r) Luis Alberto Pérez.

Vea: Muerte del celador de Equus, ¿homicidio o suicidio?

A pesar de lo complejo del caso, la Fiscalía ha avanzado en su esclarecimiento. El fiscal general, Néstor Humberto Martínez, dio a conocer un dato revelador al señalar que Merchán tenía conocimiento del crimen de Yuliana Samboní.

Para el jefe del ente acusador, los testimonios rendidos en la Fiscalía, así como las anotaciones que dejó en el libro de la minuta, no corresponden a la realidad y a lo que se encontró en los videos.

Con el dictamen queda resuelto uno de los interrogantes sobre el caso que ha sacudido a los colombianos, con el arquitecto Rafael Uribe como principal sospechoso del rapto, violación y asesinato de la pequeña Yuliana Samboní.