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SALUD

¿Qué estamos haciendo bien y qué no frente al coronavirus?

Diego Rosselli, neurólogo del Departamento de Epidemiología de la Universidad Javeriana, y Jorge Cortés, infectólogo del Hospital Universitario Nacional, destacan algunos puntos a considerar para hacer las cosas mejor en Colombia en caso de que la cuarentena continúe.

18 de mayo de 2020

Tras completar casi dos meses de cuarentena, desde que el presidente Iván Duque decretara el aislamiento preventivo obligatorio el pasado 25 de marzo, este lunes se especuló en medios de comunicación sobre la posibilidad de una nueva ampliación de la medida hasta el mes de junio. El jefe de Estado, sin embargo, desmintió esas versiones y este lunes anunció otras medidas, como la anticipación de los tres días sin IVA para el 19 de junio y el 3 y 19 de julio para poyar la reactivación de la economía nacional.

Sin embargo, aún cabe la posibilidad de que la cuarentena no se levante, como está previsto, el próximo 25 de mayo. De hecho, Diego Rosselli, neurólogo del Departamento de Epidemiología de la Universidad Javeriana, explica que "este virus llegó para quedarse, estas medidas seguirán por mucho más tiempo", por lo que en su opinión debe haber un cambio cultural para hacer mejor las cosas en Colombia.

Si bien, la medida de la cuarentena es eficaz “para aplazar la epidemia, no puede ser una medida definitiva, tiene que ser temporal y tiene el inconveniente de no ser equitativa. Es más fácil conservar la epidemia para unos grupos que para otros, aquellos que están en el rebusque les cuesta mucho más trabajo”, dijo.

“Nuestra cuarentena fue flexible desde el principio, pues hubo una cantidad de excepciones y se ha ido flexibilizando por sectores económicos, y ya es hora quizá de que discutamos la flexibilización por sectores geográficos y por necesidades de las comunidades”, opinó Rosselli.

Por otro lado, si el presidente Duque decidiera levantar la cuarentena todo dependerá “del comportamiento de las personas, más que la legislación, que es fundamental. Si la gente lo toma como que esto se acabó y volvemos a lo de antes, estaríamos en serios problemas y tendríamos un pico en unas semanas que no podríamos manejar”.

Sobre la evolución del virus en Colombia y el incremento de casos día a día, Jorge Cortés, infectólogo del Hospital Universitario Nacional y profesor de la Unal, explica que “el virus ha transcurrido de forma muy diferente en varias zonas geográficas. Las variaciones geográficas son muy importantes (…) para dar un ejemplo, Tumaco y Bogotá tienen la misma incidencia de casos, es decir, teniendo en cuenta la población ha ocurrido proporcionalmente la misma cantidad de casos en ambas ciudades”.

“Por el contrario, Leticia, con cerca de 50.000 habitantes, tiene algo así como cinco o seis veces más casos proporcionalmente que Bogotá y que Tumaco. Por otro lado, hay ciudades como Manizales y Medellín donde las incidencias son muy bajas, es decir que las variaciones regionales son muy importantes”, agregó el especialista.

A la fecha, Colombia registra 16.295 casos positivos, 592 muertos y 3.903 personas recuperadas, pero lo peor estaría por venir. Así lo opina Rosselli al advertir que “no es sino ver las experiencias internacionales, en Europa, EE.UU., y aquí vamos de para arriba. Ese proceso lo hemos dilatado con la cuarentena, hemos ganado tiempo para fortalecer nuestra capacidad de respuesta”.

“Sin lugar a duda, la pendiente nos muestra un crecimiento que todavía es exponencial, rondando por regiones entre el 4 y 6 por ciento diario, lo que indica que el pico de la pandemia debería estar llegando hacia agosto, o sea que nos queda junio, julio y agosto”, analizó.

Rosselli cree que “lo que va a ser grave es el momento en que empiece el viaje internacional de personas nuevamente, que es lo que ha detenido el crecimiento en muchos lugares”.