Ciencia
El asteroide con forma de cacahuete sorprende en su paso más cercano a la Tierra; Nasa captó en imágenes detalle clave
El asteroide 1997 QK1 fue captado por el radar Goldstone de la Nasa el 21 de agosto en una serie de 28 imágenes.

El mundo de la ciencia no deja de sorprender, especialmente gracias a los expertos que continúan explorando el universo con el fin de responder preguntas aún sin resolver y, al mismo tiempo, descubrir nuevos elementos que podrían —o no— representar un riesgo para la Tierra.
Entre los principales objetos de interés se encuentran los asteroides, que desde hace décadas han captado la atención de los científicos y siguen siendo una fuente de estudio fundamental.
A diferencia de la Tierra y otros cuerpos que han atravesado intensos procesos geológicos, muchos asteroides permanecen casi intactos. Esto los convierte en auténticos registros naturales que conservan pistas sobre los materiales originales que dieron origen a los planetas y, posiblemente, a la vida.

Uno de los hallazgos más recientes corresponde al asteroide 1997 QK1, captado en una serie de 28 imágenes obtenidas el 21 de agosto por el Radar del Sistema Solar Goldstone de la Red de Espacio Profundo (DSN) de la Nasa. En ellas se observa que el objeto tiene forma de cacahuete.
El asteroide mide alrededor de 200 metros de longitud y completa una rotación cada 4,8 horas. Según informó la Nasa, pasó su punto más cercano a la Tierra un día antes de estas observaciones, a unos 3 millones de kilómetros de distancia, es decir, ocho veces la separación entre la Tierra y la Luna.
El sobrevuelo de 2025 representa el acercamiento más próximo de 1997 QK1 en más de 350 años. Antes de estas observaciones de Goldstone, se sabía muy poco sobre sus características. Ahora, gracias a una resolución de 7,5 metros, se ha confirmado que el objeto está compuesto por dos lóbulos redondeados unidos, uno de ellos aproximadamente el doble de grande que el otro. Ambos muestran concavidades que alcanzan decenas de metros de profundidad.

Los especialistas consideran que 1997 QK1 es probablemente un binario de contacto, una estructura observada en al menos el 15 % de los asteroides cercanos a la Tierra de más de 200 metros de diámetro.
Aunque está clasificado como un objeto potencialmente peligroso, los expertos aseguran que no representa ninguna amenaza para nuestro planeta en el futuro previsible. Las mediciones realizadas por Goldstone han permitido reducir de manera significativa las incertidumbres sobre su trayectoria y su distancia con respecto a la Tierra durante las próximas décadas.
*Con información de Europa Press